Ni la NASA había podido hacer lo que la compañía privada de desarrollo aeroespacial SpaceX logró este jueves: la empresa de Elon Musk recicló un cohete y lo volvió a utilizar con éxito. El avance reducirá drásticamente el costo de la investigación del espacio.
En la tarde del jueves 30 de marzo en los Estados Unidos, SpaceX, la compañía fundada por el CEO de Tesla lanzó un cohete usado. Es la primera vez en la historia aeroespacial que el mismo aparato se utiliza en dos misiones separadas, asegura la CNN. Musk también fue el fundador de PayPal y está desarrollando un proyecto increíble: Tunnels.
El aterrizaje tuvo lugar 8 minutos y 32 segundos después del lanzamiento. “Esto demuestra que puedes volar y volver a volar un propulsor, que es la parte más cara del cohete”, dijo Musk luego del logro que ni la NASA había conseguido, a pesar de haberlo intentado en varias oportunidades. “Esto es una gran revolución en los viajes espaciales”, agregó (y tiene razón).
“Lo que logró SpaceX es considerado una hazaña. Para alcanzar este objetivo se preparó por más de cinco años y representa además un claro avance para la industria aeroespacial, que en los últimos tiempos ha intentado reducir el millonario costo que representa la pérdida o destrucción de cada cohete que es lanzado. Pero la mayoría terminaba estrellándose en el mar en su intento de aterrizaje”, publicó Clarín.
Ver una galería de fotos del lanzamiento y aterrizaje.
En realidad, los transbordadores espaciales de la NASA fueron el primer intento exitoso de aprovechamiento de una nave para varios vuelos fuera de la órbita terrestre, pero su reciclado luego de cada viaje era tan elevado, que fueron discontinuados.
Por el contrario, según Musk, la reparación y puesta en funcionamiento de los cohetes de SpaceX no es una inversión costosa.
Incredibly proud of the SpaceX team for achieving this milestone in space! Next goal is reflight within 24 hours.
— Elon Musk (@elonmusk) 30 de marzo de 2017
Un dato que demuestra que Elon Musk no para de generar proyectos nuevos es que ni bien había finalizado la misión del cohete reciclado, ya se puso un nuevo objetivo: lograr reciclarlo en sólo 24 horas.
Neuralink
El proyecto SpaceX no es el único de Musk, además de Testa, el magnate de origen sudafricano está embarcado en Neurakink, una nueva empresa formada para lograr que el cerebro humano esté conectado con las máquinas a través de los ordenadores y la inteligencia artificial. Musk lo llama el “lazo neuronal”.
Según Musk, lo que se busca es implantar pequeños electrodos en el cerebro con el objetivo de lograr cargar y descargar pensamientos, con miras a que los humanos mejoren sus niveles cognitivos.