Elon Musk la persona más rica del mundo, se ha visto envuelto en una serie de actividades políticas que le han costado grandes pérdidas en el valor de sus empresas.
Con una fortuna calculada en más de 400 billones de dólares hasta el año anterior y con una pérdida del 25% en los últimos meses, empresas como: Tesla, Space X, la red social X, Starlink, Neuralink y la más reciente xAI se han contaminado del rol político que el Sr. Musk ha estado teniendo al lado del presidente Donald Trump.
Es cierto que el poder en ocasiones significa riqueza, pero qué sucede en términos de reputación cuando un notable empresario mantiene una relación muy estrecha en este caso, con el hombre más poderoso del planeta como Donald Trump.
Se hacen sátiras en la TV americana que Elon Musk es el “copresidente”, se le ve en la Casa Blanca como si fuera su morada jugueteando con el más pequeño de sus hijos de 3 años, Techno Mechanicus, también conocido como Tau.
Participa en eventos con la prensa en la oficina oval, dando explicaciones de su rol como director del programa “DOGE”, Departamento de Eficiencia Gubernamental, por sus siglas en inglés. Papel del cual ha sido muy criticado por eliminar sin ton ni son a miles de empleados del gobierno, con tal de obtener ahorros billonarios para la administración Trump.
Hace un par de semanas se enfrasco en una fuerte discusión con el secretario de estado, Marco Rubio, en frente del mismo presidente Trump y el gabinete completo. Sin duda es un personaje fuera de serie, más allá de ser el hombre más acaudalado del mundo.
En recientes días se han vandalizado automóviles, agencias y centros de carga eléctrica de Tesla en Estados Unidos en protesta por su política de recortar costos en la burocracia, adicionalmente, él había sido un fuerte defensor de la sustentabilidad y las energías limpias, lo cual ahora con su unión a Trump está entredicho.
Las ventas de Tesla han caído gracias, por un lado, al crecimiento en la participación de mercado de marcas chinas como BYD y por otro a la amenaza de las tarifas económicas que Donald Trump quiere imponer en las próximas semanas, incluso Tesla ha sido removido en su participación en varios importantes auto shows por las amenazas de activistas sociales.
En una reciente encuesta realizada con empleados de la empresa Tesla, se detectó que en principio veían positiva la alianza de Elon Musk con el presidente Trump, dada la importante subida en el valor de las acciones de la empresa en los primeros días de la toma de posesión del presidente Trump, sin embargo, la política del nuevo gobierno no va en línea con el propósito de Tesla.
En lo personal me apasiona leer biografías de figuras como Elon Musk, Steve Jobs, Mark Zuckerberg, Bill Gates, Jeff Bezos, Larry Page, entre otros, pero ¿qué caracteriza la personalidad de estos visionarios del nuevo mundo y cómo su reputación influencia el desarrollo de sus creaciones tecnológicas que son parte de nuestro quehacer diario?
Elon Musk es conocido por ser una figura compleja y multifacética. Desde pequeño fue un niño introvertido poco sociable, vivió en una familia de tres hijos siendo Elon el mayor seguido por Kimbal y la más pequeña Tosca, donde el padre un ingeniero electromecánico, piloto, navegante y codueño de una mina de esmeraldas en Zambia, con una gran riqueza económica, pudo darles a sus hijos la educación del más alto nivel en Sudáfrica, posteriormente en Canadá y Estados Unidos.
El padre de Elon le exigía mucho y no lo bajaba de tonto e incompetente, en la escuela sus compañeros le pegaban unas fuertes golpizas, de acuerdo con la biografía escrita por Walter Isaacson, toda esta formación lo encerró en crear desde muy joven videojuegos, se devoraba los libros sobre ingeniería, cibernética y electrónica.
A los 25 años después de haber desarrollado la plataforma PayPal junto con otros socios, cuando la vendió recibió personalmente más de 20 millones de dólares, así es como inicia la carrera de este gran empresario y visionario tecnológico.
No cabe duda de que el Sr. Musk es un innovador y visionario con una capacidad única para imaginar futuros alternativos y trabajar hacia ellos.
Su enfoque en proyectos como SpaceX y Tesla refleja su deseo de transformar industrias enteras. Ha enfrentado numerosos desafíos y fracasos, pero su perseverancia lo ha llevado a superar obstáculos significativos.
Es conocido por su ética de trabajo intensa y por esperar altos estándares de sus equipos, lo que puede ser inspirador, pero también desafiante para quienes trabajan con él, de hecho, le encuentro cierto parecido con la actitud déspota hacia los demás, como lo era Steve Jobs creador de Apple en algún periodo de su vida.
Musk parece estar motivado por objetivos que van más allá del éxito financiero, como la sostenibilidad energética y la exploración espacial, aunque no es particularmente extrovertido, su pasión por sus ideas y proyectos lo convierte en un comunicador efectivo cuando se trata de sus visiones.
La innovación de Elon Musk se refleja profundamente en cada una de sus empresas, transformando industrias y desafiando los límites de lo posible. Revolucionó la industria aeroespacial con SpaceX al desarrollar cohetes reutilizables, como el Falcon 9, reduciendo drásticamente los costos de los viajes espaciales, su visión de colonizar Marte con la nave Starship es un ejemplo audaz de su enfoque futurista.
Neuralink es una empresa que busca conectar el cerebro humano con la tecnología mediante interfaces cerebro-computadora, con aplicaciones potenciales en el tratamiento de enfermedades neurológicas y la mejora de capacidades cognitivas.
xAI, su más reciente incursión en inteligencia artificial busca comprender la naturaleza del universo, mostrando su interés en explorar los límites del conocimiento humano.
En una reciente entrevista con la cadena Fox News, Elon Musk comenta que en tan solo 5 años ya estaremos viendo la robótica humanoide con más frecuencia, realizando tareas de manufactura y del hogar. Cada una de estas iniciativas refleja su capacidad para identificar problemas globales y abordarlos con soluciones tecnológicas disruptivas.
Sin duda la reputación de Elon Musk ha tenido un impacto significativo en sus empresas, tanto positivo como negativo, dependiendo del contexto y las percepciones públicas.
Lo que es un hecho es que actualmente la imagen del Sr. Musk no está pasando por el mejor momento, su cercanía y alianza con Donald Trump, así como el apoyo que ha expresado a partidos y líderes de ultraderecha de otros países como Alemania y Argentina, le están cobrando factura.
A pesar de estos desafíos, las empresas de Musk han demostrado resiliencia en el pasado, y su capacidad para innovar sigue siendo un factor clave para su éxito a largo plazo. Veamos cuánto más le puede afectar a su imagen y el valor de sus empresas al estar asociado en la política.