¡Reclutamiento de jóvenes para verdadera transformación del país!

• El México que queremos y por el que debemos luchar demanda de su creatividad, energía, transparencia y brío.

• Se requiere un México siempre en camino de reflexión y construcción de un país que responda al contexto de las exigencias nacionales en un mundo globalizado, respetuoso de la soberanía de los países, y de alianzas.

• Se necesita un México solidario con los más desprotegidos. 

• Se demanda un México con un contexto de libertades, humanista, ecológico y democrático. 

A partir de hoy enfoquemos nuestra atención, energía y acciones hacia la propuesta de mejora de las condiciones de vida de los conciudadanos y de los sistemas de administración y gobierno de nuestro país, esto lo expresamos con claridad ante la situación de desmantelamiento de las instituciones en México, incluyendo su Constitución Política, lo que ha generado en el entorno desconfianza y desconcierto en vísperas de una muy anticipada carrera por el poder presidencial para el sexenio 2024-2030. 

Antecedente histórico  

Ya tenemos experiencia en estas lides, las más disruptivas que nosotros recordamos con tristeza son los gobiernos de Luis Echeverria Álvarez (1970 – 1976) y José López Portillo (1976 – 1982). Hoy día todo indica que estamos regresando a esos años de un partido único, de un gobierno estatista y totalitario, ante esto por ningún motivo debemos callar.   

La motivación para escribir este texto surge este 2022, cuando a raíz de nuestra preocupación por el presente y futuro del país, recordamos que hace 40 años, un 19 de noviembre de 1982, un grupo de mexicanos integrantes del Centro de Estudios Contables A.C. todos ellos miembros del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas, A.C. (IMEF) entregaron al presidente electo Lic. Miguel de La Madrid Hurtado, un análisis “del porqué del desasosiego en el país” y la aportación de un amplio documento cuyo título era “El México que queremos y por el que debemos luchar. Decálogo” que trazaba con amplitud diez principios (ver siguiente imagen) que en ese momento se consideraban fundamentales para gobernar a nuestra  nación hacia una vida de seguridad y pacífica convivencia, permitiendo en ese momento que los ciudadanos se dedicaran con entusiasmo y plenitud al trabajo fecundo y creador para el progreso personal y de la nación. 

Es importante anotar que en el actual ambiente de conflicto gubernamental nacional  que enfrenta de manera desproporcionada a la sociedad civil, no es el primer y seguramente tampoco será el último problema; es aquí en donde resaltamos que los gobiernos, en una sociedad democrática con libertad y humanismo, son un medio, no son un fin en sí mismos y la población es la responsable de elegir, increpar, cambiar y hasta quitar a sus gobernantes.  

¿Qué hacer?

Vayamos como sociedad civil organizada hacia un camino de reflexión, prospección y visión del México que queremos para nuestras familias, hijos, nietos, nuestros descendientes, perfilando un país atrayente para la ciudadanía en general y para todo tipo de organización, desde el comerciante ambulante, el emprendedor, pasando por el profesionista independiente y llegando a las micros, medianas y grandes empresas. 

Dediquemos talento para concluir con un decálogo que queremos para el México del Siglo XXI, para lo cual debemos encauzar tiempo y esfuerzo en cuatro acciones generales, ver imagen: 

Sin duda surgirá un grupo importante de gente que hábilmente trabaje en un documento final que sea el reflejo del “México que queremos y por el que debemos luchar” y en el cual será deseable la participación de ciudadanos que representen los diversos sectores y de manera muy importante la juventud. 

Por beneficio de la nación deberá incorporarse a los jóvenes.

“Los vocablos ´joven y adolescente´ guardan correspondencia con el verbo ´adolecer´, que significa advertir dolencias, inexperiencia, aguantar algún defecto; apreciaciones que revelan una negatividad respecto a la condición adolescente, nutrida a su vez por el trato “amarillista” que suelen asignarles personas adultas, así como algunos medios de comunicación. Se les encuadra en un contexto de dificultades, de ello estriban perspectivas y prácticas sociales disímiles, por ejemplo, en el espacio de la mercadotecnia hay una constante ansiedad por categorizar a las nuevas generaciones para la comercialización de productos y servicios, así también en el tema de las políticas públicas dependen de cómo se defina y conceptualice a la adolescencia para efectos en temas de educación, empleo, salud, vivienda, etc.”.

De manera histórica desde tiempo de Aristóteles y Platón se les denigra y se les agravia con diversas etiquetas; sin duda alguna, estimados lector y lectora ustedes y yo hemos estado en esa pizarra de paradigmas y agravios.    

Poco más de 21 millones de jóvenes los próximos electores 

Hoy día en México existen aproximadamente (cifras de INEGI a 2020 ver imagen) poco más de 21 millones de adolescentes y jóvenes hombres y mujeres todos ellos en edades entre 15 y 24 años, desempeñándose en diversas actividades, la mayoría buscan su identidad, así como su misión y propósito en la vida, algunos estudiando y otros trabajando por diversas circunstancias, pero al final casi todos en un proceso de formación a través del estudio y la experiencia. 

En dicho contexto resaltamos esta cifra de 21 millones de jóvenes con el propósito de motivar a integrantes de la sociedad civil organizada en la importancia de voltear a ver a esa nueva generación de ciudadanos que en un futuro no muy lejano serán, si es que ya lo son: comerciantes, emprendedores, empresarios, investigadores, políticos, que se desempeñarán en múltiples actividades profesionales y técnicas, y mucho ojo, podrán ser cardinales electores y decisores del futuro de México en el 2024.

Un caso de éxito 

A continuación, presentamos un modelo colaborativo integrado por jóvenes universitarios que es considerado caso de éxito, un modelo a replicar. Se les identifica como IMEF Universitario (IMEFU). Son jóvenes hombres y mujeres en etapa universitaria, cuyas edades fluctúan entre los 18 y 24 años, periodo que se cataloga como “adolescencia tardía” que otros llaman “post adolescencia” y unos más la identifican como “juventud plena” llegando ésta a su plenitud alrededor de los 24 años.

El espacio es limitado para referir todo el marco operacional y la historia del IMEFU, por lo que hacemos una breve descripción, resaltando de esta manera la calidad de excelencia que hoy día priva en cientos de miles de jóvenes.

• El IMEFU es un modelo de trabajo colaborativo, participativo, formativo y continuo que opera hace poco más de 25 años, es una asociación adyacente legal y operacionalmente del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas A.C. (IMEF) esto lo podemos asegurar dado que los hemos visto nacer, crecer y consolidarse.
• IMEFU se encuentra regulado dentro de los Estatutos del IMEF en los Artículos 57º B. y **59º, señalando que el IMEFU es el conjunto de estudiantes interesados en las finanzas, agrupados por cada uno de los diferentes Centros de Educación Superior, que sin ser socios del IMEF cuentan con la orientación y apoyo del propio instituto para realizar actividades técnicas que fomentan su desarrollo integral y que generan valor a la Sociedad en general.

Los números también cuentan

• Presencia en 24 estados de la República Mexicana 
• 98 Universidades 
• 2,300 participativos asociados 

En México habitan jóvenes con alas para volar resueltos y muy alto. 

Los resultados con el IMEFU es una grata experiencia de 25 años de vida institucional (1996-2021), siendo varias generaciones con las cuales sigue habiendo comunicación, relación personal, profesional y gremial dentro del propio IMEF, lo que sin duda nos invita a poner las apuestas a favor de esos jóvenes  de ayer, de hoy y del mañana con gran esperanza y confianza en su integridad, talento  y capacidad creadora en el ejercicio de su responsabilidad. Sin duda México tiene millones de jóvenes mexicanos con este perfil, que de motivarles y encauzarles encarnará la posibilidad de rescatar el tiempo perdido con este gobierno en un cambio fundamental para la positiva transformación del México que queremos y por el que debemos luchar.