El proceso creativo de una obra cinematográfica conlleva varios puntos que son determinantes, comenzando por la investigación, lo que permite realizar un guión verosímil y bien estructurado con base a los paradigmas que se elija, para luego llevar a cabo los trabajos necesarios para la pre- producción así como el casting, elección de tiros de cámara, ángulos,lentes, locación, iluminación, etc. Para luego plasmar en algo tangible lo planeado y edificado en papel.
Entre el guión y la dirección puede haber piedras y tropiezos, omisión de detalles escénicos, olvido de justas palabras, puede existir un abismo si no se tiene presente que el uno complementa al otro. Sin un buen guión aunque el director sea excelente, es muy probable que no se tengan los elementos necesarios e indispensables para que sea un buen producto. Y de modo contrario, al tenerse un buen guión pero no un buen director, es difícil que se brinden las herramientas que hagan que prevalezca la esencia de la guía y la trama en particular.