Se trata de el smartphone X de la marca OnePlus. Su proceso de fabricación es sorprendente, pues no es una simple maquila, su creación dura alrededor de 25 días y comienza con un molde de zirconita de solo 0.5 milímetros de grosor.
La empresa ha explicado que la cerámica se cuece a casi 1,500 grados durante 28 horas y se deja enfriar durante dos días. Luego, cada cuerpo del X pasa por tres procesos de pulido diferentes, hasta que no tiene ninguna imperfección. De cada 100 cuerpos cerámicos que han fabricado, solo 20 pasan los controles de calidad.
El resultado es un material con una dureza de 8,5 en la escala de Mohs, equivalente al topacio, que es resistente a rayaduras. A pesar de ello, el X de cerámica solo pesa 160 gramos. Y más liviana es todavía la versión en cristal negro, llamada Onyx. El terminal más ligero y fino de OnePlus pesa 138 gramos.
El cerebro del X se completa con 3 gigas de memoria RAM y una memoria interna de 16 gigas que se puede ampliar hasta los 128 a través de una tarjeta MicroSD. Además, como se ha convertido ya en estándar para los móviles chinos, el aparato puede utilizar dos tarjetas SIM 4G a la vez, una función ideal para quienes utilizan un número personal y otro profesional o para quienes viajan y quieren utilizar una tarjeta local sin tener que renunciar a la de casa.
Cuando salga a la venta en Europa, el próximo día 5, costará 269 euros en la versión de cristal y 369 en la de cerámica, que estará limitada a 10.000 unidades. Eso es lo que pagarán quienes puedan adquirir uno, claro, porque la marca mantiene la polémica estrategia de compra con invitación en foros, concursos en Internet, o a través de amigos que lo hayan adquirido.
*Con información de El País