Uno de las acciones más nocivas en el mundo de la creatividad en todas sus modalidades es el plagio y lo mejor es que evites a toda costa la tentación de caer en él.
El plagio representa la copia o la integración total o parcial de los elementos que componen una obra creativa para ostentarse falsamente en la autoría de ella.
La actividad creativa requiere la elaboración de piezas surgidas de la imaginación y bajo ninguna circunstancia pueden darse cabida al plagio. Sigue las recomendaciones para evitarlo.
1. Si no es de tu autoría, nunca digas que lo es
Inspirarse en el trabajo de otros autores te ayudará a mejorar tus propias habilidades y aprender, pero ello no implica que puedas decir que eres el autor original.
2. Tu inspiración contra el plagio
Inspirarse o tratar de recrear el trabajo de otros autores potenciará alcances creativos, pero será tu propia inspiración la que garantizará la autenticidad de tu trabajo.
3. Conoce y reconoce tus influencias
Si estás inmerso en la creatividad y en las técnicas de tu especialidad creativa sabrás reconocer de dónde viene cada una de tus influencias.
4. Evitar el plagio a conciencia
Debes conocer tus propios alcances y aptitudes, así, cuando generes tus propias creaciones sabrás cómo diferenciarte lo suficiente para evitar caer en el plagio.
5. Copiar no es imitar ni mucho menos inspirarse
Copiar es sinónimo de reproducción idéntica -o casi- de un original, mientras que inspirarse es retomar lo mejor de una obra con los propios recursos creativos personales.
6. Imitarte a ti mismo puede impulsarte a crecer
¿Qué tal si vuelves realizar un proyecto que habías generado tiempo atrás? Reencontrate con tu propia obra te ayudará a entender qué tanto han crecido tus alcances creativos.