Si bien la Comisión Europea que analiza el tema de los agroquímicos estaría dispuesta a extender por 10 años el permiso para que se pueda seguir utilizando el químico glifosato, Francia lo prohibiría antes del final del mandato de Emmanuel Macron, que se extiende hasta 2022.
Lo dijo el vocero del Gobierno francés, Christophe Castaner, en declaraciones a la televisión BFMTV reproducidas por AFP y EFE.
“D’ici à 2022, interdiction du glyphosate + autres produits qui menacent la santé des Français” Castaner sur @BFMTV https://t.co/RKvsrsLByS
— Philippe Mathon (@pmathon) 25 de septiembre de 2017
“El primer ministro [Edouard Philippe] decidió que este producto sea prohibido en Francia, al igual que todos los que se le parezcan y que amenazan la salud de los franceses, para cuando termine el quinquenio, inclusive en el uso agrícola”, declaró Castaner, quien exhortó a los agricultores a dejar de usar el “poderoso herbicida”, y les dijo que podrían “encontrar productos de sustitución”.
A las pocas horas, y advirtiendo las reacciones desde los sectores agrícolas, desde la oficina del primer ministro, Edouard Philippe, se dio una versión más moderada. Allí se recordó en un comunicado que desde principios de 2017 el glifosato ya está prohibido en los espacios públicos abiertos (plazas, parques) y a partir de 2019 se prohibirá también su uso en jardines particulares.
En el comunicado se habla de “la elaboración de un plan para dejar de utilizar ese herbicida en beneficio de las alternativas disponibles” y de “encontrar las condiciones de una transición razonable hacia la salida del glifosato”.
“Al tiempo, el primer ministro aseguró que Francia votará contra la extensión de la autorización de este producto fitosanitario durante 10 años, un periodo que considera demasiado largo dadas las incertidumbres que hay sobre el mismo”, publicó EFE.
Reacciones
Por su parte, la presidenta del principal sindicato agrícola (FNSEA), Chistiane Lambert, dijo que Francia “no puede actuar de forma independiente del resto de la UE” y que “no se puede prohibir de forma drástica ese herbicida”, ya que primero hay que invertir en investigación para encontrar alternativas.
#Glyphosate Un rdv sans concession avec @N_Hulot https://t.co/y2nipOsZRo pic.twitter.com/CIOCLe2pAw
— La FNSEA (@FNSEA) 25 de septiembre de 2017
La decisión de Francia, tarde o temprano, será un problema para Monsanto. O en realidad, para Bayer, que adquirió a Monsanto en 2016. Es que Roundup, la marca con la que esa empresa comercializa el pesticida es una de las más vendidas del mundo.