Con el paso del tiempo, ha quedado claro para las marcas que lo que buscan los consumidores es un trato personalizado. Es decir, que cada una de sus interacciones con las compañías, sin importar el canal por el que se lleven a cabo, respondan precisamente a sus necesidades y deseos de compra.
Sin embargo, hay un fenómeno curioso. A pesar que se entiende a la perfección este concepto cuando tiene que ver con los consumidores, no parece haber una visión tan clara al momento de hablar de la relación entre las empresas y sus agencias de marketing.
Aún cuando estas firmas han avanzado mucho en la precisión de sus estrategias de marketing, la implementación de estos esquemas sigue siendo relativamente estricta. Claro, todas las agencias ofrecen un sinfín de soluciones que prometen personalizarse al caso particular de cada cliente. Pero de forma interna, hay una serie de procesos pre-establecidos que no cambian mucho de una compañía a otra.
Y esta rigidez, con un mundo post-COVID que exigirá mucha más agilidad de las marcas, puede ser un problema.
Necesidades distintas
Israel Sandoval está consciente de muchos de los retos en el actual sistema de marketing. Desde 2007 creía necesario reinventar el concepto de Agencias de Publicidad. Y es que, a su parecer, las marcas necesitan un servicio muy distinto.
Sandoval cree que no basta ofrecer servicios cualitativos, que “difícilmente son valorados como indispensables por las empresas que los contratan”. Por el contrario, apunta que desde hace más de una década hay una clara demanda por un enfoque cuantitativo.
El experto reafirma que, en este modelo, la creatividad es producto directo de los objetivos comerciales de las marcas. Y se suma el beneficio de “medir los resultados de los esfuerzos, que los clientes puedan entender el valor de su agencia de publicidad”.
Un enfoque estratégico
La fundación de Factor Idea responde directamente a esta necesidad. Sandoval creó esta firma para que presentara un concepto nuevo, el de una Agencia Consultora de Marcas.
Hay varios elementos que distinguen esta idea. Primero, según el fundador de Factor Idea, cada proyecto es minuciosamente analizado antes de ser aceptado. El seguimiento constante, no importa qué tan creativa sea la activación, ayuda a priorizar la obtención de KPIs. Pero tal vez la característica más importante es el enfoque estratégico. Sandoval apunta que “Factor Idea no se configura con un organigrama tradicional, sino como un grupo modular que se arma de acuerdo a las necesidades de cada cliente”.
Es decir, la agencia literalmente cambia y adapta su estrategia de trabajo a la perfección a las necesidades de cada cliente. Este enfoque, además de satisfacer las necesidades tradicionales de publicidad, a la vez reduce costos y potencia la efectividad del equipo de trabajo.
Pero el fundador de Factor Idea no cree que eso sea lo más importante. Por el contrario, para él su verdadero valor agregado está en poder “resolver con análisis, estrategia y creatividad las exigencias comerciales de cada cliente”.