La próxima campaña presidencial en los Estados Unidos cuenta con una nueva estratega que es conocida mundialmente no solo por su fama como cantante y novia del afamado jugador de los jefes de Kansas City, Travis Kelce, si no por su influencia en ciertos segmentos del padrón electoral americano que beneficia a los demócratas y molesta en grado extremo a los republicanos, se trata de TAYLOR SWIFT… ¿usted la conoce?

Faltan nueve meses para que los americanos acudan de nueva cuenta a las urnas y ya una gran cantidad de tropas swifties, así las llama María Porcel, una gran periodista del Diario el País, se aprestan a atacar los intentos de Donald Trump por regresar a la Casa Blanca.

La contienda electoral no tiene más candidatos que Joe Biden, de 81 años de edad y Donald John Trump, de 77 que ya probaron las mieles del poder y que desean seguir ostentando uno de los cargos políticos más importantes del mundo, el del presidente de los Estados Unidos de América.

¿Quién de los dos impondrá su narrativa al ciudadano-elector americano que observa cómo su país pierde protagonismo en el concierto de las naciones?

En el mundo de las campañas políticas siempre se ha hablado del poder de los y las influencers para beneficiar a un candidato, ya sea para que éste tenga un mayor posicionamiento o que pueda ganar la elección de una manera abultada convirtiéndose estos objetivos en la base del éxito electoral.

Es el caso de Taylor Swift, una joven americana de treinta y cuatro años, ganadora de los últimos cuatro Grammys, el mejor galardón en el terreno musical, en la categoría de mejor álbum, que ha establecido un récord con este último logro, al superar a leyendas del pop como Paul Simon, Stevie Wonder y Frank Sinatra que tienen tres.

Swift, quien tiene trescientos millones de leales seguidores en los que puede influir con un solo teclazo de su smartphone pudiera condicionar el resultado de la elección del 5 de noviembre en los EE.UU. inclinando la balanza en este caso para el bando demócrata.

Una de las claves del éxito de Swift es que su música no es una sensación pasajera, sino que la compositora se adapta a las tendencias musicales para seguir vigente sin perder su estilo propio, por eso, cuando hablamos de la Unique Selling Proposition de la estrella americana, nos referimos a que posee un estilo inimitable siendo la persona más joven en escribir sencillos sin la ayuda de nadie y cantar una canción número uno en la lista de country chart.

Su influencia bien ganada en todo el mundo está ahora inmersa en una gira mundial que suma ciento cincuenta conciertos en más de cuarenta ciudades misma que le ha dado a ganar 1,100 millones de dólares, de modo que lo que diga y cómo lo diga será analizado por segmentos muy amplios en la batalla electoral que se antoja será épica.

Otro de los objetivos clave en el desarrollo de una campaña es la generación de emociones y quién más que Taylor Swift para crearla sino pregúnteles a los dueños de los jefes de Kansas City, equipo de la NFL que buscará este domingo ganar el Super Bowl 58 y lo hará con Taylor vestida de rojo apoyando al bravo Travis Kelse.

Nos encontraremos más adelante.
Federico Torres López.