Los hÔbitos de los jóvenes para informarse ha cambiado de manera radical. Los llamados millenials poco se acercan a los medios de comunicación tradicionales y han encontrado en la era digital sus propias fuentes de información y sus propios medios de consulta.
Esto estÔ repercutiendo en todos los Ômbitos relacionados con la comunicación, desde el marketing y la publicidad, hasta las relaciones públicas y la comunicación interna. Pero, el efecto es mÔs dramÔtico estÔ en los llamados medios off line o tradicionales, que cada vez se encogen mÔs, tanto en tamaño como en número.
Es en este rubro en donde las llamadas PR2.0 o las relaciones públicas de la era digital, estÔn experimentado una apurada metamorfosis. Los consumidores, los lectores, los medios, estÔn requiriendo de contenidos, diferentes no solo en su formato, sino en su forma: mÔs útiles, mÔs valiosos, mÔs creativos, mÔs fÔciles de digerir.
Las compaƱĆas tienen tres vĆas de comunicación: la propia, bĆ”sicamente utilizada para acciones de comunicación interna asĆ como su ecosistema digital; la pagada, que es la comunicación comercial que conocemos primordialmente como publicidad y, la ganada, como se reconoce a los espacios generados por acciones de relaciones pĆŗblicas y responsabilidad social.
En referente a la publicidad ganada, los espacios en los medios tradicionales son cada vez mÔs escasos en cantidad, como en impactos, por lo que las oficinas de comunicación corporativa estÔn buscando nuevos caminos para encontrarse con sus públicos de interés.
De ahà el cambio en las PR2.0 cuyo enfoque estÔ mÔs dirigido a la conversación, a diferencia de la primera generación (PR 1.0), cuya orientación se basa en la presentación y diseminación de contenido. Las PR 2.0 buscan el diÔlogo entre las partes involucradas en el proceso de la comunicación, a diferencia de las PR 1.0, que controlan los mensajes emitidos y permiten un proceso de retroalimentación total.
Estas condiciones han obligado a las empresas a revisar sus estrategias de comunicación y migrar a otras opciones que les permitan llegar con mayor certeza a su target, con un lenguaje cuyo elemento vital es la verdad y la transparencia de la información.
Se podrÔ rebatir que las empresas ya tienen sus sitios de internet, sus blogs y hasta sus redes sociales. De acuerdo, estos son exactamente sus medios de comunicación, pero la gran diferencia estriba en la producción de los contenidos y es aquà donde aparece el Brand Journalism o periodismo de marca.
En pocas palabras, la nueva estrategia comunicativa consiste en la creación de sus propios medios y contenidos para llegar directamente al público que les interesa. Es una herramienta poderosa en las estrategias de marketing editorial. MÔs allÔ de informar las últimas noticias corporativas, se trata de crear publicaciones que generen conocimiento y aumenten la reputación de marca. Son las nuevas RRPP.
El reto es descubrir y construir información valiosa en beneficio de la marca, contar historias para construir una imagen completa, incrementar conocimiento y afinidad a la marca, crear una manera para diferenciarse de la competencia: autoridad y reconocimiento
Los requisitos del contenido del periodismo de marca, se basan ante todo en su utilidad, pero también debe de ser entretenida, educativa, informativa, inteligente, atractiva y discreta. No se trata de gritar la marca, se trata de generar conocimiento y a través de esa aportación enganchar a los lectores/públicos.
āLas marcas que lo entiendan correctamente, permitirĆ”n un desarrollo profesional financiando proyectos periodĆsticos de calidad que a largo plazo beneficien la reputación de la empresaā, afirma Enrique Dans, profesor de TecnologĆas de Información del IE BUSINESS SCHOOL de Madrid.