Los pacientes, en todo el mundo, se han transformado con el uso cotidiano de la tecnología. Hace poco la Fundación Mexicana para la Salud (Funsalud) dio datos reveladores sobre el creciente papel de la tecnología en la gestión de la salud. Solo por dar un ejemplo: 82% de los usuarios afirmó que la información de salud encontrada en Internet le es sumamente útil, con lo cual queda claro que estamos ante una transformación significativa en la forma en que las personas acceden y utilizan recursos de salud.

El informe destaca que las aplicaciones de mensajería instantánea, la búsqueda de videos en línea y el uso de redes sociales son las actividades digitales más comunes entre los pacientes para abordar temas de salud. Esto refleja un cambio en la dinámica tradicional entre médico y paciente, con Whatsapp como el principal canal de comunicación entre ambos, esto a pesar de la reticencia de las generaciones anteriores, como la de los Baby Boomers e, incluso, los de la Generación X.

Es importante hacer mención que este trabajo de investigación fue desarrollado por Central Media, Agencia Digital, liderada por su director general, Enrique Culebro Karam, quien destacó que “la información está disponible para que las personas, especialistas e interesados en el sector salud, conozcan a mayor detalle sobre los hábitos digitales de las personas y el cuidado de su salud.”.

Es muy claro que el acceso a información de salud en línea ha empoderado a los pacientes, sobre todo al permitirles buscar respuestas y recursos de manera rápida y conveniente. Sin embargo, este empoderamiento también plantea desafíos significativos en términos de la calidad y veracidad de la información disponible en la Web.

Durante la presentación de este análisis, el presidente ejecutivo de Funsalud, Héctor Valle Mesto, destacó la importancia de comprender las preferencias y hábitos digitales de los pacientes para mejorar la prestación de servicios de salud a través de plataformas digitales. Esto es crucial, especialmente en un contexto de pandemia de Covid-19, donde el interés por conocer más sobre síntomas, enfermedades y tratamientos aumentó significativamente.

Llama la atención ver cómo la tecnología puede ser una aliada en el cuidado de la salud, pero también debemos ser conscientes de sus limitaciones y riesgos. El acceso a información médica confiable y la capacidad de discernimiento de parte del paciente son fundamentales para evitar la propagación de desinformación y la automedicación irresponsable.

Dicho estudio también resalta la importancia de plataformas como Youtube y el comercio electrónico en el ámbito de la salud. Sin embargo, es crucial garantizar que la información proporcionada sea precisa y esté respaldada por evidencia científica sólida, porque todos conocemos que en la Web se puede encontrar de todo, lo bueno y lo malo.

El análisis se convierte así en una herramienta valiosa para comprender mejor el panorama digital de la salud en México. Esto demuestra un compromiso genuino por parte de todas las partes interesadas en abordar estos desafíos de manera colaborativa.

En última instancia, el estudio de Funsalud nos recuerda la importancia de adaptarnos a los cambios en el panorama digital de la salud y aprovechar así las oportunidades que ofrece, al tiempo que mantenemos un enfoque crítico y cauteloso para garantizar la seguridad y el bienestar de todos los involucrados.

Dicho estudio presentado por Funsalud está disponible en el sitio:  https://www.pacientedigital.mx/, el cual permitirá la actualización en tiempo real de la información.

El botiquín

• Finalmente, gracias a Dios, terminaron las obras de remodelación de las “Fuentes de los Venados” del Parque Francisco Villa, en la Alcaldía Benito Juárez, pero al ver el trabajo terminado, no podemos sino afirmar que todo esto fue “mucho ruido y pocas nueces”, como diría Shakespeare. En realidad, nada nuevo bajo el Sol, todo se ve más o menos como antes, solo que ahora todo sazonado con tierra y materiales de la construcción por aquí y por allá. A los viejos mosaicos de los asientos que rodean la fuente ni siquiera les pasaron un trapo. En resumen, desde la perspectiva de quien esto escribe, dicha obra fue un gasto infructuoso