Vender lujo ha dado paso a una serie de estrategias que han logrado adaptarse a diversas economías a través de elementos como el impacto tecnológico y la generación de experiencias.
Muchas de las marcas de lujo siguen apostando a su herencia histórica, como mayor fundamento para lograr estrategias comerciales que se caracterizan por productos costosos y exclusivos, entre otros factores.
El mercado de lujo se ha caracterizado por contar con grandes participantes. Revisemos cifras proyectadas por Millward Brown, Kantar Worldpanel y Bloomberg, al proyectar que Louis Vuitton, Hermés y Gucci encabezaron la lista de las marcas más valiosas dentro de este segmento, en una proyección de Statista publicada en junio pasado.
Si bien se trata de marcas que forman parte del segmento de bienes de lujo, la industria está fortalecida por diversos segmentos como el hotelero o automotriz, sin embargo, la capacidad del mercado de bienes de lujo es tal que alcanzó un valor en 2016 por 249 mil millones de euros, según una proyección de Statista.
Ante determinado mercado, donde el valor de marca, productos exclusivos y muy costosos y la experiencia, la tecnología ha terminado por sumarse a esta lista de factores que han hecho al mercado de lujo uno sumamente ambicioso, debido a la demanda que ha registrado en economías como la mexicana, como parte de un fenómeno en que países emergentes han aumentado la demanda de este tipo de productos de manera radical.
Lo anterior se ha determinado debido al impacto digital que ha habido en el mercado de lujo, donde el mercado se ha determinado por la interacción en 100 por ciento a través de dispositivos móviles.
Para lograr entender a detalle este mercado, una obra que resulta fundamental para lograrlo es The Luxury Strategy: Break the Rules of Marketing to Build Luxury Brands de Jean-Noel Kapferer y Vincent Bastien.
En su obra, ambos autores logran hablar a detalle de los modelos de negocio implementados en el segmento de lujo, así como las estrategias que cada una de estas marcas ha personalizado al grado de lograr ventas, sin importar las situaciones económicas negativas que pueden registrarse en determinadas economías.