Se entiende por Growth Hacking como estrategias de posicionamiento en el marketing, que se obtiene mediante una combinación de analítica, creatividad que puede hacer crecer el número de usuarios.

Si bien no es una combinación de herramientas o técnicas para atraer clientes, lo cierto es que nace de la necesidad de identificar formas de crear estrategias para hacer crecer negocios. Quien así lo entiende la coordinadora de media marketing de Vans México, Yalia Bailleres.

Compañías como Vans lograron captar la atención del público consumidor de calzado mediante análisis, en su tiempo, de campo, así como estrategias de creatividad que la posicionaron como marca de una subcultura.

Sin embargo, el growth hacking se convirtió en tendencia en los últimos años, principalmente en Estados Unidos, ya que los especialistas de marcas o agencias que trabajan bajo esta modalidad requieren un perfil analítico, siendo muy creativo, y argumentar sus estrategias.

Entre las fases del Growth hacking destaca el encaje producto-mercado, así como estrategias funcionales, escalas de hábitos de consumo, fidelización, optimización, hasta tener las ideas adecuadas para diseñar un producto que sea viral.

De acuerdo con Yalia, en la era de marketing digital se ha convertido en una disciplina que busca mínimos gastos para incrementar de forma rápida y notoria el volumen de usuarios o ingresos, o impactos de cualquier empresa.