A veces seguimos rutinas en el trabajo y suponemos que es correcto, pero gestionar tu startup o pyme empíricamente, no es rentable.

Es frecuente preguntar o que nos pregunten: ¿dónde trabajas?, ¿cómo te tratan?, las respuestas no siempre son favorables. Tus colaboradores deberían reflejar pasión, confianza y compromiso por la organización… transmitir, ¡ahí quiero trabajar!

De acuerdo al Centro para el Desarrollo de la Competitividad Empresarial, 75 por ciento de las PYMEs mexicanas fracasa durante los primeros 2 años existencia.

Seguramente realizaste una cuantiosa inversión para Pyme, ¿cómo fomentar la rentabilidadad, crecimiento de tu empresa y evitar que seas un Hombre orquesta?

¿Por qué apoyarte de un Consultor de Recursos Humanos?

Ignorar a las personas en tu Startup o Pyme y suponer que eso no interesa, causa graves estragos a tu operación.

1. Administración y gestión empírica

No hay indicadores en tu empresa y sí llegan a haber, no se revisan, monitorean, ni actualizan, nadie asume la responsabilidad porque las instrucciones varían de acuerdo a criterios subjetivos.
¡Toma enserio las riendas de tu empresa, sí quieres que crezca exponencialmente, debes gestionarla profesionalmente!

2. Falta de integración de equipo

La Administración de tu startup o pyme, puede ser por outsourcing, por lo tanto la gente siente que no es parte de uno ni de otro, incluso no tienen uniforme, no son invitados a las reuniones de trabajo y eso le reflejan y comunican al cliente.

No basta con tener buenas prácticas aisladas, debemos ocuparnos y ser proactivos, piensa en el futuro de tu empresa, haz que sea sostenible y sustentable.

3. Cuellos de botella constantes

Debido a la falta de responsables, se designa a personas temporalmente, quizás al de Administración o a un asistente, por favor no improvisemos, la Reputación de tu Marca como Empleador, está en riesgo, es típico escuchar y ver Alta rotación, en un sitio donde reina la desorganización.

No existe un Canal formal de comunicación, por lo tanto es común escuchar: “ya le pregunté y me dejó en visto”, mandar un correo cuando tienes a la persona frente a ti, llevar esperando una respuesta por más de tres meses, porque te comentan otros temas en tu correo, excepto lo que preguntaste.

4. Te encuentras en una “Zona de Confort”

Los comentarios, suelen ser: “Clima Laboral, aquí no es necesario”, Documentar tus procesos, eso no importa, a veces tenemos “ceguera de taller” y no vemos con claridad la problema.
Es importante integrar a tus colaboradores a una empresa donde hay un ambiente profesional, competitivo y empático.

5. Reclutamiento empírico

Un proceso tan sensible como es el Reclutamiento y Selección, muchas veces se lleva a cabo sin conocimientos previos, por lo cual, no se usa una Metodología.

Muchos suponen que realizar un Proceso de Reclutamiento, significa adaptarte a sus costumbres empíricas y no a un proceso formal, por lo cual debes “congelar tus propios conocimientos para obedecer órdenes”, o que el Reclutamiento, lo lleve alguien como parte de sus actividades administrativas como hacer la cobranza, recepción, demeritando esta fabulosa labor, esto implica reprocesos, mayor tiempo en cobertura de vacantes.

6. No hay Procesos definidos

No es de extrañarse que no exista una Cultura Laboral definida, pues en la empresa, se carece de Manuales, Procesos, Políticas, Reglamentos y se supone que la gente debe saber hacer su trabajo sin llevar a cabo un proceso formal de integración, ¿te ha sucedido?

Las empresas de todos giros y tamaños, requieren profesionalizarse y gestionar su Talento Humano con bases sólidas, de lo contrario acontecerán problemas que podrían haberse evitado, como son las Multas, Mala Reputación como Empleador, Alta Rotación y Ausentismo, Baja productividad, Reprocesos, entre otro, son parte del grave impacto de no gestionar a tu Capital Humano, ¡Te urge ayuda!
Nelli, ¿qué me recomiendas?, te invito a profesionalizar tu Startup o Pyme, puedes apoyarte de un Consultor el cual te brindará una mejor visión para implementar un Modelo con base en tus áreas de oportunidad, recuerda ¡Renovarse o Morir!

¿Has pasado por algo semejante?

Fuente:

Mi experiencia profesional en consultoría de negocios.

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