En estos meses que han transcurrido del 2020 el segmento del streaming de video es uno que sin lugar a dudas se ha visto impulsado por todo el tiempo que la gente ha llegado a invertir en las distintas opciones y contenidos al estar mĆ”s tiempo confinados en sus hogares por consecuencia de la pandemia. Tal como sabemos, solo en el caso de Netflix se tiene que la plataforma logrĆ³ sumar unos 15 millones de suscriptores en el primer trimestre del 2020 cuando el mundo ya se preparaba para resguardarse. AdemĆ”s, ha sobresalido que las proyecciones de crecimiento de ingresos del streaming de video este aƱo se han situado en 51.6 mil millones de dĆ³lares a nivel mundial, segĆŗn datos compartidos por Statista, mientras que la proyecciĆ³n de la tasa de crecimiento anual compuesto se ha calculado en 10.7 por ciento para los prĆ³ximos 5 aƱos. No obstante puede que las previsiones y todo el futuro prometedor que tiene el streaming terminen antes de lo esperado. Los indicios de ello estarĆan en un par de situaciones que se han registrado recientemente en el tan querido y prometedor terreno del streaming.
El primer caso se refleja en la grĆ”fica sobre el boom de suscriptores que tuvo Netflix en el primer trimestre de este 2020. Al final de la imagen se observa que en cuestiĆ³n de nuevos suscriptores la plataforma tuvo una caĆda importante en cuanto a la suma de mĆ”s personas, apenas logrĆ³ 2.2 millones, mientras que en el trimestre anterior la cantidad llegĆ³ a una cifra cercana a los 10 millones. Lo anterior se tradujo en una caĆda en la bolsa ya la pĆ©rdida de al menos 16 mil millones de dĆ³lares de valor de mercado, segĆŗn lo reportaron diversos medios.Ā Con este cambio tan importante tuvo que modificar sus previsiones para los trimestres que estĆ”n por venir y si bien la compaƱĆa explicĆ³ en su momento que ya tenĆa contemplada una desaceleraciĆ³n de su crecimiento en cuanto a suscriptores debido a un efecto de arrastre, existe otro detalle en el exterior que puede que estĆ© interviniendo en el crecimiento de esta y otras plataformas de streaming.
El problema serĆa que se estĆ” llegando a un punto donde el nĆŗmero de competidores es cada vez mayor, mientras que las audiencias tienen que elegir por quĆ© servicio optar.
ĀæA partir de cuĆ”ntos competidores ya se considera que hay demasiados?
A raĆz de Ć©xito que ha tenido Netflix en el terreno del streaming, diversas compaƱĆas se han decidido sumar con sus propias plataformas en lugar de dejar que un solo ente siga aprovechando sus contenidos para acumular una fortuna. Como hemos reportado a lo largo de los aƱos y en los Ćŗltimos meses, al mercado del streaming se han ido sumando poco a poco a distintas opciones. En la imagen de abajo se detalla una lĆnea del tiempo que deja ver la llegada de algunas de las plataformas mĆ”s notorias al mercado.
Como se ve arriba, sobresale la llegada de Hulu en 2008, Prime Video en 2011, Disney+ y Apple TV+ en 2019 y HBOMax junto con Peacock y Quibi este mismo aƱo. Sin embargo, la firma WINP detalla que ya hay mĆ”s de 400 servicios de suscripciĆ³n de vĆdeo bajo demanda (SVOD)Ā en todo el mundo los cuales quieren una rebanada de pastel de este mercado.
Si bien se entiende que es un elemento positivo el que exista competencia pues ello propicia que las empresas no suban sus precios y mejoren sus ofertas, existe un problema cuando la competencia por el mercado es muy elevada, este se fragmenta. El mejor ejemplo para entender el problema lo refiriĆ³ Statista hace unos meses atrĆ”s:
Imagina un mercado de alimentos que ofrece un increĆble ticket de todo lo que puedas comer por solo 20 dĆ³lares, que incluye todo, desde pizza hasta pasta, hamburguesas, cortes, sushi y muchas opciones de postres. No hay competencia entre cabinas individuales, y tu estĆ³mago estĆ” lleno y estĆ”s satisfecho cuando compras el paquete. Ahora imagina que cada puesto cobra 12,99Ā dĆ³lares por acceso ilimitado a sus propias ofertas, pero nada mĆ”s. Toda la pizza que puedas comer por este precio suena bien, pero Āæy si quieres empezar con un poco de pasta? En ese caso se tendrĆ”n que desembolsar otros 12,99 dĆ³lares y probablemente otros 5 mĆ”s por un helado despuĆ©s como postre. Con ello en cuenta, la competencia entre puestos ha encarecido la cena que ibas a tomar.
AsĆ pues, en el caso del streaming, Netflix era lo mĆ”s parecido al buffet, pero con el paso de los aƱos el mercado del streaming se ha fragmentado con diversas compaƱĆasĀ llevando sus propias ofertas con acceso parcialmente exclusivo a sus contenidos. AdemĆ”s, de hacer las cosas mĆ”s complicadas para los competidores, en cuestiones como el poder conseguir nuevos suscriptores, la elevada competencia puede dejar rĆ”pidamente fuera del mercado a quienes busquen sumarse.
Un ejemplo de ello puede ser el caso del reciente cierre de la plataforma Quibi (misma que se habĆa lanzado este aƱo). La que prometĆa convertirse en el “Netflix” de los dispositivos mĆ³viles tuvo que cerrar, entre otras cosas, por no encontrar financiamiento por parte de los suscriptores y otros entes para la creaciĆ³n de contenidos originales. Si bien se atribuye principalmente que su fallo fue porque la pandemia confinĆ³ a la gente en sus hogares haciendo mĆ”s conveniente el recurrir a los servicios de streaming desde la televisiĆ³n u otras pantallas mĆ”s cĆ³modas (Quibi solo estaba disponible para mĆ³viles), las mĆŗltiples opciones dejaron sin espacio a esta app, dejando tambiĆ©n en claro que no resulta fĆ”cil competir contra gigantes como Ā Netflix, Disney+, Amazon Prime Video o Apple TV+.
En relaciĆ³n a esto, y para el caso de las firmas que han logrado establecerse, la competencia entre las distintas plataformas de streaming que existen, y vuelven mĆ”s complicado todo hoy en dĆa, no solo es por el dinero de los suscriptores, tambiĆ©n es por su tiempo. En 2018 se tenĆa identificado que el tiempo promedio que los consumidores destinaban, en el grupo de mayor participaciĆ³n (los de 18 a 24 aƱos), era de 39 minutos a nivel mundial. AsĆ que las plataformas han tenido que generar sus mejores propuestas e invertir recursos para que los consumidores les den su tiempo, y es posiblemente aquĆ donde se encuentre la mejor oportunidad para mantenerse en un mercado competido.
Dado que el espacio estĆ” saturado y puede ser una gran batalla el lograr que las decisiones de compra de los consumidores apunten a una u otra opciĆ³n (o varias), ya sea nueva o con aƱos de existencia, mĆ”s que buscar nuevos suscriptores, las plataformas de streaming deben comenzar a pensar en aferrarse mĆ”s a los suscriptores que ya tienen pues este serĆ” el principal desafĆo para los servicios existentes, ello tomando en cuenta que la competencia se ha intensificado y el crecimiento ha sido el causante de este escenario.