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La NHTSA apunta que ha estado involucrada en casi una veintena de investigaciones en choques con Tesla
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En todos ellos, el software de conducción autónoma de la compañía habría sido responsable parcial o total de los daños ocasionados
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Hay diferentes niveles en la sofisticación de la tecnología, desde simples ayudas al conductor hasta pleno control del vehículo sin apoyo
La mayor barrera para la aceptación de la conducción autónoma es perfeccionarla sin causar miedo o pánico en la industria. Un problema al que Tesla ha decidido enfrentar más temprano que tarde. De acuerdo con The Verge, la compañía automotriz finalmente lanzó su software de robo-taxis como una prueba beta pública. Es decir, algunos afortunados consumidores ya han podido actualizar sus vehículos para que puedan manejar sin ninguna ayuda de los humanos.
Hasta ahora, los resultados parecen estar a medio camino entre el terror y el entusiasmo. The Verge apunta que varios usuarios de Tesla se han dedicado a filmar y publicar en redes sus experiencias con el software de conducción autónoma. Algunos han calificado el programa como “algo aterrador”, porque puede realizar acciones casi humanas cuando antes no era posible. Otros han alabado la complejidad de algunas de las nuevas maniobras del automóvil.
Overly cautious at a roundabout… I didn’t have to interact until the end of the process. Not bad for the first attempt! Go FSD BETA! pic.twitter.com/3gPkztUWgY
— Brandonee916 (@brandonee916) October 22, 2020
Sin embargo, las acciones de Tesla están siendo observadas cuidadosamente por el gobierno de Estados Unidos (EEUU). De acuerdo con Reuters, la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico y en las Carreteras del país (NHTSA), dijo que está revisando con mucho cuidado esta prueba beta. También aseguró que se iban a tomar las medidas necesarias para proteger a la audiencia si se teme que el programa puede poner en riesgo a conductores o peatones.
Una iniciativa de Tesla que puede terminar en desgracia o éxito rotundo
Las pruebas de conducción autónoma plena no son nada nuevo, y tampoco la compañía de Elon Musk es la primera en realizarlas. De acuerdo con Az Central, Waymo One, el servicio de Google que busca rivalizar a Tesla en esta tecnología, empezó pruebas de sus vehículos en la zona del East Valley en EEUU. La única diferencia es que, en lugar de poner a los conductores y clientes de la marca a analizar los resultados, se integró como parte de su sistema de taxis.
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Tesla está tomando un riesgo enorme con esta iniciativa. Como ya se dijo, el principal riesgo de probar la conducción autónoma es que lleve a un accidente severo o mortal. En 2018, de acuerdo con CNN, incrementó la desconfianza hacia estos vehículos en 10 por ciento. Esto, a raíz de una serie de incidentes con los vehículos de Elon Musk y de Uber. Según The Detroit News, menos de una quinta parte de la gente se sentiría a gusto usando un coche automático.
Pero si resulta que esta versión del software es efectiva, Tesla estaría muy adelante de sus rivales. De acuerdo con Wired, muchas de las inversiones en conducción autónoma se han detenido, en gran parte a raíz del costo excesivo de desarrollar estos sistemas. A eso se debe de sumar que, como expresa Deloitte, la mayor parte de los agentes de la industria aún deben desarrollar un modelo viable para este sector. Algo en lo que Elon Musk ya está a la delantera.
Avances en el mercado de la conducción autónoma
Junto con Tesla, otros agentes de tecnología y automotrices han logrado notables logros en el desarrollo de la conducción autónoma. Por ejemplo, Didi prometió en junio que, en menos de una década, ya tendría más de un millón de robo-taxis operando en todo el mundo. Con esta promesa no solo logró hacer temblar a rivales como Lyft y Uber, que también han perseguido metas similares. También llamó la atención de otros agentes en el sector de tech y automotriz.
Hay otras empresas que han tomado proyectos llamativos para acercarse al objetivo que está persiguiendo Tesla. Por ejemplo, Toyota presentó un robot capaz de jugar básquetbol. Esto, con el objetivo que le ayudara a desarrolla tecnologías útiles para producir su propio sistema de conducción autónoma. La idea de la iniciativa es que, con retos creativos, sus ingenieros sean capaces de encontrar más dinámicamente las soluciones más difícil para este sector.