Por Luis Miguel Martínez
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A lo largo del pasado reciente ha surgido la pregunta recurrente sobre cómo será el futuro de la Internet. Evidentemente, el futuro cercano será igual que el reciente, salvo alguno que otro salto cuántico, que sea contrario a lo previsto por la variedad de “leyes” postuladas y de observaciones como la mítica curva de adopción de la tecnología de Gartner.
Hace algún tiempo el Gartner Group desarrolló una metodología para estudiar la adopción de las nuevas tecnologías en el tiempo. Cada año publica la llamada Hype Curve. De acuerdo con su postulado, las cinco etapas de adopción son: a) el disparo tecnológico, b) el pico de las expectativas infladas, c) el valle de la desilusión, d) la pendiente de la iluminación y e) la meseta de la productividad.
Probablemente, la etapa más peligrosa para un producto sea el valle de la desilusión, cuando el grueso de la población, actuará como juez y dictará si la tecnología sobrevivirá o no. Es decir, sobrevivirá para intentar llegar a la meseta de la productividad y gratificar a sus creadores y vendedores. Las tecnologías que no salen del valle de la desilusión podrán ser obsoletas o sustituidas.
Para 2010, de acuerdo con las observaciones de la Universidad de Harvard, se pensaba en que las tablets con pluma tendrían mucho éxito -evento que no ha sucedido gracias a las tecnologías touch. Otro ejemplo serían las tecnologías de reconocimiento de voz. Así, Apple incorporó Siri a su sistema operativo. Esta aplicación, te permite usar la voz para mandar mensajes, programar citas o hacer llamadas telefónicas.
Estos modelos, incluso las leyes de Moore y de Metcalf, permiten jugar al adivino y apostar a un escenario futuro. Asi, el futuro de la Internet parece ser incierto. Para la Internet Society, surge de cuatro escenarios en donde haya un balance entre lo generativo (innovación, competencia) y la reducción (seguridad, control de riesgos), así como entre la descentralización (poca regulación, estándares abiertos) y control y comando.
Hasta el momento, los jóvenes buscan un escenario de generación y poca regulación, similar al entorno para el desarrollo del software de código abierto. Por otra parte, las generaciones ya consolidadas, buscarían escenarios de control y de seguridad. Asi, veremos cómo en diversos foros surgen propuestas que apoyen cualquiera de estas dos propuestas e incluso a la del balance entre dichas posturas.
Así, durante el reciente Congreso de Alianzas Educativas (#CAAE), realizado en la Ciudad de México, escuchamos propuestas diversas que nos sugieren el futuro de la Internet. Hasta ahora, no hay tendencias claras. Estemos atentos al futuro, que pronto llegará, tal como #dicen por ahí, #ShiftHappens.
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