• De acuerdo con Disney, los usuarios están cada vez más decididos a consumir contenido a través de los canales online

• Por esta misma razón, está decidido a centrar su estrategia de películas y series a su plataforma de streaming

• Incluso ha tomado esta misma filosofía con las salas de cine, dándoles tiempos más cortos para disfrutar de proyecciones exclusivas 

La casa del ratón ya ha decidido que su prioridad estará en el mundo digital y en Disney+. De acuerdo con Bloomberg, la dueña de Marvel, Pixar y LucasFilms tiene planeado cerrar 100 de sus canales de TV a escala internacional. Estos planes son aparte de las 30 transmisiones que cortó durante el año pasado. La idea es movilizar la compañía a un futuro donde la prioridad sean los servicios de streaming, incluyendo otras plataformas como Star+, Hulu y ESPN+.

El CEO de Disney, Bob Chapek, dijo en una conferencia de JPMorgan Chase que la mayoría del contenido dentro de su compañía migrará a su plataforma de streaming principal. Apuntó también que este enfoque es parte de su transición hacia un modelo más direct-to-consumer (D2C). El directivo aseguró que el cierre de canales dependerá de los contratos que se tengan en cada mercado individual. Y es que varios aún están proporcionando buenos rendimientos.

Un ejemplo de esta transición a online se puede ver en el mercado asiático. Bloomberg apunta que Disney lanzó su unidad Hotstar en India el año pasado. Este servicio incluye partidos de cricket y otro contenido deportivo local. Al mismo tiempo, la empresa cerró muchos de sus canales de deportes en el sudeste asiático y Hong Kong en abril pasado. Chapek afirmó que, como marca, quieren estar al frente de la ola del consumo de contenido en línea, no detrás.

¿Valdrá la pena el sacrificio de la TV?

La agresiva transición a Video-On-Demand (VoD), quitando recursos a canales tradicionales, es tal vez necesaria para alcanzar las enormes expectativas del mercado. De acuerdo con Statista, en febrero de 2021 se calculaba que Disney finalmente podría superar a Netflix en suscriptores a finales de 2026. Sin embargo, la diferencia es mínima. Y el actual líder de la industria del streaming tiene una ventaja muy importante frente a todos los demás rivales.

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Al mismo tiempo, solo observando las cifras, Disney podría estarse disparando en el pie. En datos también de Statista, en el año fiscal 2020 los ingresos de la empresa por sus redes de medios a escala global le generaron ingresos por 28 mil 390 millones de dólares (mdd). Por su lado, su segmento de D2C apenas le trajo 16 mil 970 mdd. Cierto, ya es su segundo mayor pilar. Sin embargo, está todavía lejos de convertirse en su principal herramienta económica.

También es importante considerar que el entorno de VoD, aunque relativamente abierto y aún con mucho espacio para crecer, no tiene un potencial ilimitado. Otro reporte de Statista apunta que la penetración de los servicios de streaming se irá estancando alrededor del 20 por ciento de la población global para 2025. No solo eso, sino que Disney debe aceptar que el ingreso promedio por usuario podría llegar a su punto de saturación cuando alcance los 80 dólares.

Amenazas a los planes de Disney

Hay otra razón por la que cortar lazos con la TV podría ser una mala idea de Bob Chapel: La creciente competencia en el sector. No hay que olvidar que AT&T y Discovery anunciaron hace poco que unirían unidades de contenido. La fusión no solo surge de un deseo de la telecom de simplificar su modelo de negocio. También quieren tener un frente mucho más fuerte para luchar contra el dominio de Disney y la creciente amenaza que representa para este mercado.

Asimismo, muchas des sus rivales están explorando sistemas alternativos de generación de ganancias para influir en la decisión de los consumidores desde la parte de precios. HBO Max, por ejemplo, ya decidió lanzar una versión de su plataforma con anuncios para reducir el costo de la suscripción. Sin sus canales de TV, Disney podría verse en la incómoda posición de no poder financiar sus operaciones de streaming sin subir el costo a los usuarios demasiado.