Era de esperarse que este momento llegaría: un fidget spinner, objeto que causa sensación a nivel mundial, se vende en Rusia en cerca de 17 de mil dólares estadounidenses. La pieza está hecha de oro puro y estará disponible en agosto.
En abril pasado los fidget spinners, o simplemente spinners, tomaron por asalto al mundo y el interés y las ventas se crecieron de formas pocas veces vistas. Originalmente se vendía como un producto para combatir el estrés y otros problemas de concentración o de salud, aunque su efectividad no ha sido comprobada y es simplemente un placebo.
Los fidget spinners se venden en las calles y tiendas de casi todo el mundo con precios a partir de los 30 pesos mexicanos, menos de dos dólares estadounidenses. Además se crearon redes de distribución persona a persona, con spinners de mayor calidad o fabricados con temas como películas o diseños exclusivos. Los vendedores son desde niños en las escuelas hasta oficinistas que los cobran en la quincena.
Una compañía está fabricando fidget spinners para un mercado premium. En Rusia, la empresa CAVIAR, que cobró fama en el pasado por sus modelos de iPhones modificados, sacó a la venta una línea exclusiva con spinners hechos de oro.
El Spinner Full Gold está compuesto de 100 gramos de oro puro y tiene un precio de 999 mil rublos rusos, unos 16 mil 700 dólares estadounidenses o más de 300 mil pesos mexicanos.
CAVIAR también tiene spinner a precios “más accesibles”, como el Tricolor o el Carbon Skull, que cuestan 14 mil 900 rublos, unos 25 dólares.
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¿Qué podemos aprender de la existencia de fidget spinners tan caros? Casi siempre, cuando ocurren este tipo de cosas es una señal de que una moda está en su punto más alto y pronto dejará de generar interés.