“Despacito”, el éxito que arrasó en 2017 y lideró semanas todos los rankings mundiales de música, se quedó con las manos vacías en la entrega número 60 de los Grammy.
Estaba nominada para tres premios, y no ganó ninguno. ¿La razón? Si bien no hay una prueba fehaciente de esto, la canción compuesta por Erika Ender e interpretada por los boricuas Luis Fonsi y Daddy Yankee adolece de un grave “problema” que pareciera insalvable: el idioma de su versión original. Así es, en las largas décadas de historia de los Grammy, nunca los premios a Canción del Año (premio al compositor) y Grabación del Año (premio al producto completo) habían sido concedidos a un tema en español.
Había un lejano antecedente que podría compararse. Hay que remontarse a 1958, cuando Domenico Modugno logró el máximo premio con el clásico “Nel Blu Di Pinto Di Blu (Volare)”, canción en italiano. Era la primera edición de los Grammy.
“Despacito” perdió el galardón a Grabación del Año ante “24K Magic”, de Bruno Mars; y el de Mejor Canción del Año se lo llevó “That’s What I Like”, también de Bruno Mars. El hawaiano de 32 años fue el gran triunfador de la noche con seis premios.
“Despacito” tenía una chance más: Mejor Interpretación Pop de un Dúo o Grupo, en su versión remix con Justin Bieber. La incorporación del inglés del canadiense podía darle una posibilidad. Sin embargo, ese premio fue para “Feel It Still’”, de Portugal – The Man.
Jay-Z, sin nada
Si Mars fue el gran ganador, Jay-Z fue el gran perdedor. Kandrick Lamar se llevó cinco grammys y se quedó con todos los aplausos en el duelo de raperos, género que volvió a quedar desplazado del máximo premio a la música en los Estados Unidos. Jay-Z estaba nominado a ocho premios y no ganó nada.
En la categoría de pop, las nominaciones de Kesha y Coldplay no tuvieron oportunidad frente al disco Divide, de Ed Sheeran.
Más allá de la derrota de “Despacito”, los Grammy de 2018 ya habían hecho historia desde el punto de vista de la diversidad. Hay varios elementos que lo demuestran:
- Por primera vez no hubo ningún artista blanco entre los nominados al mayor premio, el de grabación del año.
- Entre los nominados al mejor disco, sólo Lorde es blanca.
- Nunca en la historia de los premios había habido tres nominados negros al mejor disco (Jay-Z, Childish Gambino y Kendrick Lamar).
- “Despacito”, un trabajo 100% en españo,l estuvo nominado a Canción del Año y Grabación del Año.
En la historia reciente de los Grammy, los máximos ganadores habían sido, por ejemplo, Adele, Taylor Swift, Ed Sheeran, Beck y Sam Smith.
Camila Cabello aprovecha los Grammy para defender a los dreamers – https://t.co/Dt6TBMuJky pic.twitter.com/EECF5l2ltC
— Merca2.0 (@Merca20) 29 de enero de 2018