Aunque pareciera extraño, en un país donde las escuelas de comunicación han proliferado casi como tiendas de conveniencia, generando una sobreoferta de profesionales, no es tan fácil encontrar candidatos para cubrir cabalmente el perfil de un profesional de las relaciones públicas.
Y no estamos juzgando nivel de estudios, conocimientos, habilidades o personalidad. No, simplemente no le dan el grado merecido a las capacidades y los requisitos que la actividad exige para convertirse en un profesional de las relaciones públicas en toda la extensión de la palabra. Y más que con títulos profesionales, estas están más asociadas con la actitud, el compromiso y la destreza profesional.
He aquí, un decálogo con 10 reglas que un profesional de las relaciones públicas nunca debe de olvidar si pretende forjar una carrera exitosa.
- Proactividad. Una de las quejas más recurrentes en las relaciones públicas, es la pasividad. La práctica requiere iniciativa y creatividad. Siempre hay que estar un paso por delante de los deseos y necesidades del cliente. Eso baja la presión en la relación y definitivamente, impacta positivamente en los resultados.
- Disponibilidad. Al cliente le indigesta escuchar de su ejecutivo de relaciones públicas que no tiene tiempo para atenderle. Esto puede ser producto de agencias que tienen estrictas políticas de rendimiento que se apegan al número de horas por las que un cliente esta pagando por su consultoría, a desorganización o desinterés. Siempre hay que responder a una solicitud del cliente, porqué habrá formar de compensarlo, mientras que una respuesta negativa, sienta un precedente a veces imborrable.
- Creatividad. Existen acciones de relaciones públicas que se han vuelto parte del paisaje y casi se encuentra en cualquier despacho especializado. La diferencia la hace un GRAN IDEA, esa acción que nos va a diferenciar del resto.
- Estrategia. Las agencias de relaciones públicas estamos cada día más enfocados a nuestro papel de consultor, por eso los clientes están esperando el desarrollo de un pensamiento estratégico que impacte positivamente en sus planes de negocio.
- Medición. Hay quien sigue pensando que los resultados en las relaciones públicas se miden en base a los medios ganados, lo que es un principio ya rebasado. Por eso, es primordial definir con anticipación los KPI´s, para no solo contar con parámetros de medición, sino para obtener un juicio equilibrado y equitativo sobre los resultados del trabajo.
- Relacionamiento. La tarea de relacionamiento nunca termina. Uno de los valores de un profesional de relaciones públicas es su capacidad y nivel de relacionamiento.
- Serenidad. Según estudios, las relaciones públicas es la tercera profesión más estresante del planeta. Los comunicadores están sujetos a una alta presión generada por sus superiores, sus clientes y terceros de quienes muchas veces pende el resultado de su trabajo.
- Respalde la información. No se fíe de su memoria y menos de la de su cliente. Anote, grabe, confirme por escrito. Es crucial.
- Preparación. La práctica de las relaciones públicas está en constante evolución. El surgimiento del internet ha cambiado sustancialmente la profesión, tanto en el sentido de la diseminación de mensajes como la forma que las audiencias los consumen.
- Trabaje en equipo. La agencia y el cliente son un binomio que debe de trabajar con la misma intención e intensidad. No permita que esa relación se convierta en una competencia en la que no habrá ganadores.