El boom de los autos eléctricos autónomos ha catapultado a compañías como Tesla, no obstante, las críticas sobre la delicada fabricación de sus baterías recargables, así como los materiales químicos que se necesitan para su producción, parecen crecer, con más argumentos, y uno de ellos los ha dado el CEO de Ferrari, Sergio Marchionne.
De acuerdo con Sergio, los autos eléctricos “no están tan limpios como parecen”, ya que su impacto ambiental es tan elevado como los motores de combustión, debido a que las baterías de los vehículos eléctricos tienen una base de producción que es energía nuclear, lo cual es peligroso si éste representa una solución a problemas del medio ambiente.
Marchionne reconoce que la industria automotriz se está “electrificando”, además de sus estrategias de marketing, las cuales están impulsando las ventas de los vehículos, no obstante, recalcó que estos modelos no suelen ser rentables a largo plazo para la mayoría de fabricantes, o no todavía, quizá por ello los elementos eléctricos de un auto son artefactos del motor o de los interiores, pero no el motor en su totalidad.
En tanto, aseguró que Ferrari no tiene planes públicos de fabricar autos eléctricos, ya que éstos no encajarían en la imagen de la marca, la cual destaca por sus motores de combustión y lograr los 100 kilómetros por hora en 4 segundos.
Sin embargo, Ferrari reconoce a Tesla como un competidor, no por sí mismos, sino por la presión gubernamental de distintos gobiernos, quienes buscan reducir las emisiones de carbono y rediseñar sus ciudades con vehículos eléctricos. Según Sergio, cada uno de sus autos perdería en promedio, 20 mil dólares en valor si decidiera volverlos eléctricos.