La tecnología sigue ayudando para que cualquier persona se sienta involucrada con su producto o servicio favorito.

El experiential Marketing ayuda a que el consumidor forme parte de las marcas para generar relaciones a largo plazo con el consumidor y establecer lazos emocionales que lo relacione de una manera más intima y para que no se sienta ajeno al producto.

No solamente las marcas lo están aprovechando. Artistas, como la polémica y peleonera Azealia Banks, empiezan a aprovechar los recursos de la tecnología para “congraciarse” y relacionarse aún más con sus seguidores.

¿Quién no ha querido salir en un video de un artista internacional, aunque sea como extra? Bueno, igual doy por sentado que todos los lectores tienen un “famosillo-wannabe” en su interior y caigo en un error.

Tal vez, entonces, algunos o algunas se habrán visto cuando eran niños cantando frente al espejo alguna canción, tomando el cepillo como micrófono y haciendo caritas frente al espejo, como si fuéramos ese artista de la pieza musical de la que estamos haciendo mímica. Ni hablar, a muchos un poquito de “artistas” nos sale de vez en cuando aunque cantemos como un gato aullando.

Azealia Banks acaba de lanzar el video para su tema Wallace, donde nos da oportunidad, gracias a la tecnología, para que aparezcamos junto a ella en el video en su versión interactiva.

En su sitio interactivo, que solo puede utilizarse en Google Chrome, invita a los usuarios a utilizar su webcam para que salgan como fondo de su video mientras la artista canta.

Mientras, si el usuario mueve su cabeza hacia los lados, arriba o abajo, puede controlar los movimientos de Azealia Banks.

El video dirigido por Nick Ace y Rob Soucy, y producido por la agencia Collins (empresa consultora de marca), puede tener esas características gracias a que está desarrollado a partir de la plataforma Google Cloud y ya está siendo nombrado rápidamente en Twitter, donde la gente comparte el momento en que están participando en el video.

Pueden entrar al link http://wallace.azealiabanks.com/ y permitir que se use su webcam para que vean este interesante experimento. Recuerden que sólo opera en el navegador Chrome.

No importa que no se sepan la canción, el chiste es aparecer detrás de la artista haciéndole un poco de coreografía o “caras raras” y tener la experiencia de que en los videos publicitarios de nuestros artistas favoritos también nosotros somos la estrella.

¡Órale! ¡A bailar!