El tema del racismo ha trascendido y ahora no sólo la publicidad de las marcas está dentro de esta discusión. La manera en la que operan los negocios de estas firmas está siendo evaluado con lupa por parte de diversas institución y del propio consumidor lo que ahora parece haber metido en aprietos a Uber.
En años pasados, la plataforma de transporte ya habría atravesado problemas por la supuesta falta de inclusión en su plantilla laboral y ahora un nuevo estudio indica que su algoritmo cobraría tarifas más altas a personas que terminan su viaje en barrios mayoritariamente negros.
¿Tarifas especiales?
A esta conclusión llegó un estudio firmado por la Universidad George Washington el cual apunta que Uber así como otras aplicaciones similares podrían estar cobrando más a los usuarios de barrios mayoritariamente negros de Chicago.
La investigación llegó a estas conclusiones luego de analizar más de 100 millones de viajes realizados entre noviembre del 2018 y diciembre de 2019.
En este análisis se encuentra que el algoritmo de Uber y demás apps de transportación habría ajustado sus tarifas para hacerlas más elevadas en función del destino de cada viaje, en donde el precio se elevaba de manera considerable en destinos caracterizados por tener población mayoritariamente negra.
Adicional, se encuentra que el algoritmo podría estar haciendo este ajusto por otro factores como “”la edad, el precio de las viviendas, la educación y la etnia”. El estudio se define como “el primer trabajo a gran escala” de los algoritmos que determinan los precios de las aplicaciones de transporte.
De manera puntual, “el análisis muestra que los usuarios de aplicaciones de ridehailing en la ciudad de Chicago podrían estar experimentando un sesgo social en relación a las tarifas de precios según sean recogidos o llevados a barrios con un porcentaje bajo de individuos por encima de los 40 o con un porcentaje bajo de individuos con el graduado escolar o menos”, apunta el informe, al tiempo que destaca que “los usuarios podrían estar experimentando un sesgo social si son recogidos en un vecindario con un bajo porcentaje de casas con un precio menor que la media de Chicago, o llevados a un barrio con un bajo porcentaje de personas blancas. Esto implica que los usuarios en barrios con un porcentaje más bajo de estos parámetros demográficos podrían estar experimentando un impacto dispar y tener que pagar más por carreras que usuarios en otros barrios”.
No es la primera vez ni la única marca
Hacia 2015, un estudio firmado en la universidad The Princeton Review, descubrió, era el doble de probable que cobrase más a los estadounidenses con ascendencia asiática que a otros clientes.
Lo cierto es que desde hace algunos años, los algoritmos de distintas plataformas en han mantenido en el ojo del huracán por supuestamente favorecer o discriminar a ciertos grupos. Uno de los casos mas recientes se relaciona con TikTok, red social que buscaría que sus servicios sólo fueran utilizados por gente guapa, delgada y con dinero con el fin de granizar contenido “adecuado” para su hace y mantener sus tasas de crecimiento.
Así lo refiere un nuevo artículo firmado por The Intercept medio que luego de revisar documentos dirigidos a los moderadores de contenido de la red social determino que Tik Tok tiene medidas que, pensadas supuestamente par mejorar la interacción de los usuarios, favorece aquellos contenidos en función de medidas especificas.
Tal como lo menciona el artículo Tik Tok habría desarrollado una serie de reglas que buscaría perseguir y penalizar aquel contenido de personas que tuvieran un forma corporal “anormal, barriga cervecera, obesidad” o que tuvieran “rasgos faciales feos o deformidades”, así como el de quienes grabasen sus vídeos en un entorno “ruinoso o feo”.