Luego de lo sucedido entre diversos influencers y la promoción de las propuestas del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), muchas marcas en el mercado mexicano deberán de pensar algunas de sus estrategias actuales.
Y es que más allá de las sanciones que el partido pueda tener por parte de las autoridades reguladoras tener alrededor de esta controversia, lo cierto es que la imagen de muchas de estas personalidades quedó dañada a tal grado que el consumidores se niega a comprar productos recomendados por las celebridades involucradas.
Sin seguidores, sin conversiĂłnÂ
El asunto es especialmente importante si reconocemos que una parte importante de las marcas ahora mismo está apostando por estrategias de influencer marketing ara enfrentar el proceso de reactivación y compensar algunas actividades que quedaron suspendidas tras la llegada de la pandemia.
Estudios recientes indican que la industria del influencer marketing tendrá un valor 10 mil millones de dólares para 2020, esto gracias a que el 43 por ciento de los equipos de mercadotecnia experimentan con acciones de marketing de influencia para definir el valor real que aporta a su marca.
En medio de un contexto en el que las actividades BTL, las promociones en punto de venta y los espectaculares, entre otros, pierden terreno ante las medidas de aislamiento impuestas por las autoridades de salud en diferentes mercados del mundo, estas ventajas parecen ganar peso a los ojos de las marcas.
Ante la pandemia, las marcas ven en las acciones de influencer marketing un salvavidas importante que les permiten mantener contacto con sus audiencias aĂşn cuando la norma indica mantener distancia.
AsĂ lo revela una reciente encuesta firmada por BrandMe, la cual indica que el 87 por ciento de las marcas apuestan por el influencer marketing para hacerle frente al coronavirus.
Un mal negocio
Lo cierto es que en medio de esta demanda por influencers, cuando menos en el mercado mexicanos muchos de ellos han apostado mal por un negocio, en donde el consumidor ha sido duro al dictar su sentencia.
Cuando menos asà lo deja ver una reciente encuesta realizada por Merca2.0, misma que deja ver que los consumidores no solo castigarán a estos influencers diciendo adiós como sus seguidores, sino que además, se negarán a comparar aquellos productos que patrocinen.
De manera puntual, de acuerdo con los datos obtenidos por Merca2.0, el 60 por ciento de los encuestados asegura que luego de lo ocurrido con el Partido Verde, dejará de seguir a los influencers y celebradas involucradas; solo el 3.5 por ciento permanecerá como follower de los mismos.
En este punto es justo reconocer que 36.5 por ciento de los encuestados no era seguidor de ninguna de las personalidades involucradas.Â
El consumidor no sĂłlo buscará reducir el alance de estos influencers sino que además expresa, cuando menos en teorĂa una falta de confianza en sus recomendaciones que se traduce en una menor intenciĂłn de compra.
A la pregunta, ÂżcomprarĂas algĂşn producto promocionado por los influencers involucrados en el caso del Partido verde, el 98.2 por ciento de los encuestados asegurĂł que no lo harĂa.
Ante estas cifras las marcas se verán obligadas a repensar sus estrategias alrededor del influencer marketing.
Y es que lejos de las cifras pagadas por cada historia o publicaciĂłn, lo que en realidad se jugaron estos influencers fue la credibilidad un tema que ha sido especialmente difĂcil construir al interior de un gremio que una vez más demuestra que la falta de regulaciĂłn y Ă©tica en sus actividades cuesta mucho a las marcas.Â