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China es considerada la segunda potencia económica más grande del mundo, solo debajo de EEUU
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Mientras el coronavirus tiró los bienes y acciones asiáticos, también ayudó a posicionar algunos valores americanos
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Entre ellos, los bonos del Gobierno federal norteamericano y metales preciosos como el oro
A lo largo de las últimas semanas, el coronavirus se ha convertido en una amenaza de salud de escala internacional. Hace unas horas que se registró la primer muerte por este patógeno fuera de China, el país de origen. En México, algunas marcas han empezado a implementar medidas de protección contra la infección que podrían rayar en la paranoia. A eso se le deben de sumar los efectos sociales, políticos y económicos de la epidemia en casi todo el planeta.
No se trata de un análisis exagerado. De acuerdo con The Diplomat, el brote del coronavirus podría provocar una transformación completa del entorno geopolítico internacional. Por otro lado, en cifras de Al-Jazeera, hay varias consecuencias económicas que el bloque asiático podría enfrentar, entre ellas en sectores como turismo, retail y aviación. A eso se le debe de sumar que el Atlantic Council cree que podría debilitar muchos sistemas cruciales de China.
Y es que precisamente China es la que más ha sufrido por la crisis del coronavirus. El brote de la epidemia se ha mantenido casi exclusivamente dentro de las fronteras de su país. Si bien hay varios países con infecciones registradas, la amplia mayoría de los casos y las muertes se concentran en esta nación. Lo anterior ha provocado que la situación peculiar de su gobierno sea especialmente grave. En especial en lo que se refiere al plano del desarrollo económico.
Coronavirus destruye la economía de China
Reuters publicó una serie de reportajes que reflejan la grave situación en la que el país asiático está tras el impacto del coronavirus a lo largo del país. Una vez que terminó la suspensión por el Año Nuevo Lunar, acciones y bienes valiosos provenientes de la nación se desplomaron al abrirse los mercados de China. De hecho, se cree que los negocios perdieron, en conjunto, alrededor de 270 mil millones de dólares (mdd) únicamente en la bolsa de Shanghái este lunes.
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También hay otros efectos que el coronavirus tuvo en el mercado internacional a raíz de los retos que enfrenta China. Los precios del petróleo en todo el mundo sufrieron una caída de gran magnitud, a medida que la demanda dentro del país asiático se debilitó por culpa de la crisis. Por otro lado, las firmas del sector industrial de la nación asiática presentaron terribles cifras. De hecho, es la baja más alta que experimentó el sector en los últimos cuatro años.
¿Hay alguna relación con EEUU?
Los problemas económicos de China por el coronavirus se ven también reflejados en la forma que han reaccionado y sufrido las marcas originarias y con presencia en el país. Google se vio forzado a cerrar sus oficinas corporativas en el segmento continental de la nación asiática. Por otro lado, Starbucks también tuvo que cerrar varios de sus locales por el miedo de contagio entre los colaboradores de la cadena. Las medidas fueron replicadas por otras empresas más.
No es un secreto que desde hace meses que los Estados Unidos (EEUU) y China están en un conflicto comercial. Claro, ya hay tratados de negocio bilaterales entre las naciones que van a resultar en una relación más benéfica para ambas partes. A la vez, bloqueos y acciones contra empresas como Huawei eran, abierta y claramente, una forma en las que se buscaba asegurar el dominio económico norteamericano. Por eso el fenómeno del coronavirus es tan curioso.
En algún momento se percibieron las medidas comerciales contra China como una medida de EEUU para limitar el potencial de su rival asiático. El brote de coronavirus lograría justo aquello que la potencia americana parecía desear hace no tantos meses. Por supuesto, el patógeno es un riesgo real para todos los países del mundo. Pero también representa una oportunidad sin precedentes para que Washington tenga su tan ansiada ventaja económica en la escala global.