• La IA moverá en la economía mundial unos 16 mil millones de dólares.

• El valor comercial global derivado de la IA se estima en un total de 1,2 billones de dólares.

• Los productos inteligentes representan el 18 por ciento del valor de IA.

Las nuevas tecnologías siguen creciendo en todo el mundo, es por eso que ya muchos gobiernos comienzan a lanzar restricciones que permitan hacer un buen uso de estas. Recientemente, el gobierno de Joe Biden en Estados Unidos (EEUU), dio a conocer una serie de objetivos ambiciosos dirigidos a combatir los daños causados por el surgimiento de los sistemas de Inteligencia Artificial, incluyendo directrices sobre cómo proteger la información personal y limitar la vigilancia.

En los últimos meses, han ido surgiendo muchos proyectos con el uso de la Inteligencia Artificial, es por eso que según datos de Gartner, el valor comercial global derivado de la inteligencia artificial se estima en un total de 1,2 billones de dólares en 2018, lo que supone un aumento de nada menos que el 70 por ciento con respecto a 2017.

Asimismo, la consultora PwC, estima que en los próximos 10 años, la IA moverá en la economía mundial unos 16 mil millones de dólares, por lo que muchos la consideran como el mayor reto y la mayor oportunidad que tiene hoy la humanidad.

EEUU y la IA

Este martes, el gobierno de Estados Unidos, dio a conocer una serie de objetivos ambiciosos dirigidos a combatir los daños causados por el surgimiento de los sistemas de inteligencia artificial, incluyendo directrices sobre cómo proteger la información personal y limitar la vigilancia.

De acuerdo a funcionarios, el Plan de Acción para una Carta de Derechos de Inteligencia Artificial no fija acciones específicas de ejecución, sino que es presentada como un llamado a la acción por el gobierno para proteger los derechos digitales y civiles en un mundo lleno de inteligencia artificial.

“Esto es el gobierno Biden-Harris diciendo que necesitamos trabajar juntos, no solamente en todo el gobierno, sino en todos los sectores, para poner realmente la equidad en el centro y los derechos civiles en el centro de las formas en que hacemos y usamos y gobernamos las tecnologías”, dijo Alondra Nelson, vicedirectora de ciencia y sociedad en la Oficina de la Casa Blanca de Políticas de Ciencia y Tecnología.

“Podemos y debemos esperar más y demandar más de nuestras tecnologías”, agregó.

Asimismo, la oficina dijo que el documento oficial representa un avance grande en la agenda del gobierno para hacer que las compañías tecnológicas rindan cuentas y resaltó los diversos compromisos de agencias gubernamentales para considerar nuevas reglas y estudiar los impactos de las tecnologías de la inteligencia artificial.

Este documento se da a conocer luego de un año de consultas con más de dos decenas de departamentos e incorpora además opiniones de grupos de la sociedad civil, tecnólogos, expertos de la industria y firmas tecnológicas como Microsoft y Palantir.

En ese mismo orden, los funcionarios proponen cinco principios centrales que la Casa Blanca debe ser incluidos en los sistemas de inteligencia artificial para limitar los impactos del sesgo algorítmico, dar a los usuarios control sobre sus datos y garantizar que los sistemas sean usados de forma inocua y transparente.

En conclusión, los principios resultantes, no vinculatorios, citan estudios académicos, estudios de agencias y reportes noticiosos que han documentado daños reales causados por herramientas de inteligencia artificial.

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