En YouTube, Instagram y otras plataformas de video se ha generado una poderosa industria liderada, en la mayoría de los casos, por jóvenes que se dedican a compartir contenido, reviews de productos, opiniones sobre distintos temas y más. Pero no todos creen que el influencer marketing tiene sentido.
Los youtubers o vloggers, que no son lo mismo que bloggers, son parte del segmento del influencer marketing, que en teoría ayuda a las marcas a tener una conexión más cercana con los consumidores.
De acuerdo con un estudio de Traackr y Top Rank Marketing, los mercadólogos consideran que los principales objetivos del influencer marketing son: mejorar la relación con la marca, expandir el brand awareness, alcanzar a nuevas audiencias, incrementar el boca en boca y mejorar la conversión de ventas.
Hay vloggers para todo tipo de temas y hay quienes tienen millones de seguidores. Esta es una industria compuesta por cientos de miles y en algunos casos las marcas les pagan viajes y experiencias para que las compartan con sus seguidores. En otros casos los youtubers se acercan a las empresas para obtener cosas gratis.
Un caso reciente llama la atención porque pone en evidencia una actividad común en el sector. El dueño de un hotel en Dublín, Irlanda, se ha ganado amigos y enemigos al señalar a una vlogger que le pidió hospedarse gratis junto con su novio a cambio de posts sobre el establecimiento.
El propietario del hotel The White Moose Café, Paul Stetson, publicó que una joven de 22 años le hizo la propuesta pero a él no le pareció buena idea porque tiene que cubrir el costo de la operación y el sueldo de los empleados.
Stetson no publicó el nombre de la youtuber pero días después Elle Darby, quien tiene 87 mil seguidores en YouTube y 76 mil en Instagram, publicó un video diciendo que era ella. Esto provocó que sus fans atacaran al dueño del hotel, quien desde hace días tiene una guerra de comentarios en las redes sociales.
De acuerdo con varios reportes, muchos usuarios de la red se han dedicado a crear reviews señalando una supuesta mala calidad del lugar, aún sin haberlo visitado.
https://www.youtube.com/watch?v=g8zElbN2_hg
El asunto parece menor pero es un síntoma de lo que está ocurriendo en la industria del influencer marketing: vloggers exigiendo cosas gratis a cambio de menciones y empresas que no están dispuestas a hacerlo porque no le ven utilidad.
Otro problema en este segmento ocurre en Instagram, donde muchos influenciadores han sido descubiertos comprando followers para ofrecer un mayor alcance (muchas veces falso) a las marcas y parece que este tema cobrará aún mayor relevancia durante 2018.