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El título de Dragon Ball Fighterz se llevó el premio entregado por la cadena ESPN.
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Concursó con títulos como Rainbow 6 Siege, League of Legends, Super Smash Bros. Melee, CS:GO, Fortnite, Overwatch y Rocket League.
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Los eSports ganan presencia año con año, tanto que para muchos están destinados a ser la siguiente gran audiencia deportiva.
El juego de Dragon Ball FighterZ fue elegido este jueves como el mejor título eSport de 2018, de acuerdo con la cadena de noticias deportivas ESPN.
El juego inspirado en la saga, creada por Akira Toriyama, fue tomado en cuenta por su alta competitividad, además de tomarse en cuenta varios títulos como: Rainbow 6: Siege, League of Legends, Super Smash Bros. Melee, CS:GO, Fortnite, Overwatch y Rocket League.
ESPN indicó que la fórmula de FighterZ ha tomado a la escena de los juegos de lucha por sorpresa, pues son muchas las cosas que podrían haber salido mal. Entre ellas que el juego priorizara los gráficos sobre la jugabilidad o que fuera muy similar a los otros juegos de la saga.
Otra de las razones por las cuáles reconocieron el título fue porque su estudio, Arc System Works, diseñó un “sistema fácil de aprender y difícil de dominar”.
Dragon Ball FighterZ es un juego de peleas en formato “2.5D”, es decir, gráficos en 3D, pero desplazamiento en 2D. Acaba de ganar el premio a mejor juego de peleas por The Game Awards y actualmente se encuentra disponible para todas las consolas y PC.
Los eSports ganan presencia año con año, tanto que para muchos están destinados a ser la siguiente gran audiencia deportiva.
Su potencial económico está fundamentado en gran medida por su atractivo, durante 2017 los eSports atrajeron una audiencia de aproximadamente 385 millones de espectadores, pero para 2020 podría alcanzar los 589 millones, más que muchos grandes eventos deportivos en la actualidad.
Ya no son sólo plataformas como Twitch, Youtube Gaming, Hitbox o Mirrativ las que apuestan por los eSports, ahora también van las grandes cadenas de medios como la BBC, Disney, Sky y Hulu.
De ahí que no sea extraño que las marcas se sumen a la tendencia con otro tipo de productos como calzado o ropa especial o controles o hardwares especiales.