Donald Trump continuó este sábado sus críticas contra Amazon, acusando a la compañía de estafar al Servicio Postal de su país.

“Mientras hablamos sobre el tema, se informa que la Oficina Postal de Estados Unidos perderá 1.50 dólares en promedio por cada paquete que entregue para Amazon. Eso equivale a miles de millones de dólares”, señalo Trump.

El mandatario dedicó un par de mensajes en Twitter a criticar a la compañía de ventas por internet.

“Si la Oficina Postal ‘incrementa sus tarifas de paquetes, los costos de envío de Amazon aumentarían en 2.6 mil millones’ de dólares. Esta estafa a la Oficina Postal debe detenerse. ¡Amazon debe pagar costos reales (e impuestos) ahora!”, reclamó Trump.

En su polémica con la empresa, el presidente también arremetió contra la prensa, al mencionar “al fallido New York Times” y al “falso Washington Post” como “cabilderos” de Amazon.

De acuerdo con CNN, el Servicio Postal de Estados Unidos está perdiendo dinero, pero su servicio de entrega de paquetes es rentable, a diferencia de la entrega de cartas.

El Servicio Postal está obligado por ley a cubrir los costos de entrega de productos competitivos, como paquetes para Amazon, y la Comisión Reguladora de Correos, que supervisa el servicio, fijó la proporción apropiada de esos costos en 5.5 por ciento hace poco más de una década.

Según CNN, el problema monetario más grande del Servicio Postal es que tiene miles de millones en obligaciones de jubilación para sus trabajadores que no puede pagar.

Amazon paga a la Oficina de Correos de Estados Unidos para entregar paquetes a las puertas de los clientes, incluso los domingos, y debido a que la empresa envía tantos paquetes a través de la oficina de correos, se cobra a un precio menor que la mayoría de los clientes, informó CNN.

Sin embargo, aclaró que Amazon no recibe una tarifa especial, sino la que la oficina de correos cobra a granel, y ni la compañía ni el servicio postal han revelado los detalles de su acuerdo, que la institución pública considera mutuamente beneficioso.

El jueves, Trump había criticado a Amazon al asegurar en Twitter que la compañía no pagaba “impuestos a los gobiernos estatales y locales” y “que muchos negocios se afectarán” por esa competencia desigual.

Amazon recauda el impuesto a las ventas en cada estado y paga impuestos locales sobre la propiedad en sus centros de distribución, así como en las tiendas Whole Foods que compró el año pasado.