Disney Channel alcanzó una audiencia de 33 millones de televidentes durante la primavera de 2016, esto de acuerdo a cifras de Nielsen Scarborough.
El mercado de medios y la comercialización de contenidos se convirtieron en una oportunidad clave para lograr estrategias que están generando resultados.
Como parte de esta apuesta encontramos tendencias en las que ahora las personalidades de medios como la televisión, han logrado flexibilizar su marca personal a canales como YouTube, donde cuentan con audiencias cada vez más interesadas por consumidor información o contenidos que se adapten a sus estilos de vida.
Un ejemplo de ello ocurrió con un estudio conducido por TiVo a nivel mundial en 2016, cuando descubrió que los usuarios de internet dedicaban cuatro horas a ver televisión/video.
Esta cifra nos ayuda a entender el actual ecosistema de medios donde los canales tradicionales conviven con los recursos digitales, ya sea a través de redes sociales o plataformas como YouTube, donde logran registrar números millonarios de suscriptores a sus canales.
Un ejemplo de ello es Disney Channel, que en la primavera de 2016 registró una audiencia de 33 millones 90 mil televidentes tan solo en Estados Unidos.
En YouTube, el canal en su versión latinoamericana cuenta con más de seis millones 146 mil suscriptores.
Ver la capacidad que logran estos canales en un mix de medios tradicionales y digitales se convierte en una interesante apuesta por parte de la industria cuando vemos decisiones como la que tomó esta cadena al despedir a Jake Paul, un famoso yuotuber (con más de ocho millones de suscriptores) que participaba en la serie Bizaardvark, luego de que como parte de su estrategia de contenidos, incendió un colchón en una exclusiva zona residencial, lo que provocó la molestia y cobertura por parte de las noticias.
Llama la atención ver cómo los medios han avanzado a una fórmula en que la mezcla de canales tradicionales con digitales se ha propuesto a lograr mayor diversificación en su audiencia, a través de recursos innovadores.
