Este candado biométrico ha sido diseñado para los ciclistas urbanos que están cansado de lidiar con los seguros de combinación o los más clásicos de llaves. Con el nombre de ‘Grasp Lock’, este dispostivo reconoce la huella dactilar del pulgar en su pantalla de diseño ergonómico, para que se abra el enganche y se pueda retirar de la bicicleta.
Un diseño ingenioso realizado con metal en su interior y cubierto de goma suave al tacto, para no dañar las bicicletas. Además, este candado esta conectado a una aplicación que permite a los usuarios ingresar las huellas digitales de otras personas, por si necesita ser compartido.
Por ahora se encuentra en etapa de recolección de fondos en kickstarter, donde espera recabar 75.000 dólares, de los cuales lleva recolectados unos 20.000 además de la repercusión mediática que está recibiendo en numerosas publicaciones especializadas en gadgets y diseño.