Con la pandemia, los hábitos de consumo han ido cambiando y la forma de compra con ellos, lo que ha llevado a las marcas a cambiar sus estrategias para buscar nuevas formas de interacción y acción con los consumidores para llevarlos a la compra.
Estos cambios impactan en el journey comportamental de los usuarios al no tener la misma trazabilidad de los espacios vitales donde se desarrollan , por lo que es indispensable tener claridad sobre los nuevos patrones de los clusters a los que nos dirigimos.
Las marcas han visto que los canales de comunicación y venta han migrado hacia los dominios .com y otras plataformas mobile, enfocando así los esfuerzos en lo que llaman digitalización e innovación para vivir. Sin embargo, el problema radica en la falta de entendimiento de las diferencias entre estos. Las marcas comienzan con “digitalización”, realizando sus esfuerzos en el canal, pero sin tener journeys definidos del consumo, ni objetivos de las diferentes plataformas; comienzan con el diseño de sitios transaccionales, creación de contenido en redes sociales con un Call to Action a la compra y esperando que de este modo las ventas incrementen.
Tan sólo en México, previo al periodo de la pandemia, el 70% de las empresas no se encontraban digitalizadas y menos del 30% no habían entrado en la transformación digital. Durante la pandemia más del 35% de las empresas han migrado sus esfuerzos de marketing hacia canales digitales, y gran porcentaje de estos han comenzado durante el confinamiento a abrir sus plataformas de ecommerce, muchas de ellas sin tener trazabilidad sobre cómo atacar a cada uno de los canales donde incluyen el digital dentro de su mix.
Es por esto que hoy, las marcas que buscan adaptarse a los cambios deben innovar pero en sus procesos, tanto internos como externos (esto incluye el proceso de marketing), para volverlos más eficientes. Por ejemplo, gestionar con resultados medibles, hacer más con menos y llegar a los usuarios de una forma cercana que nos ayude a convertir, considerando o no los canales digitales en la mezcla (tanto interna como externa).
Una vez que existe esa mezcla de plataformas para los procesos, existe una variante importante: la transformación digital. Ésta busca oportunidades que se puedan resolver a través de canales digitales, con uso de plataformas de gestión, creacionismos de contenidos, paranormal sociales, dominios .com y paid media que pueda ayudar a llevar tráfico hacia nuestro .com.
Hoy en día, el término “innovación”, que ha sustituido al famoso término “disruptivo”utilizado anteriormente, incluye una mezcla de digitalización y creatividad, que poco considera los verdaderos objetivos de la marca o las oportunidades que estas tienen ante la nueva realidad.
Por eso, es necesario que las marcas, antes de hacer desarrollos, cambiar su estrategia de marketing a digital y enfocar sus presupuestos a redes sociales, vean hacia dentro de la empresa buscando cómo pueden innovar desde lo que tienen y cómo pueden abordar los nuevos esquemas de consumo de sus consumidores, usando, en algunos casos, plataformas digitales que construyan y den valor a su estrategia.