• El 15 de marzo es el Día Mundial del Sueño, una iniciativa que busca crear conciencia sobre los problemas de salud a causa de los transtornos del sueño.

• En América Latina, el valor de mercado para tratar problemas y transtornos del sueño, como la apnea, estima un total de 930 millones de dólares.

• Te puede interesar: Los mejores horarios para publicar en redes sociales

Generalmente, las personas restan importancia al sueño y el tiempo que descansan. De hecho, parece que es una de las cosas más infravaloradas, pues muchos no ven las horas perdidas como un factor de riesgo a la salud. Y lo cierto es que no podían estar más equivocados.

Debido a que muchas personas le restan valor al “factor sueño”, es importante priorizar el hecho de que la falta de productividad laboral y otras acciones vinculantes a los errores laborales son ocasionados por la falta de sueño. Aunque una persona no lo considere de esa manera, el cerebro humano sabe más acerca de lo trascendental que es dormir adecuadamente.

Ah…, y también el sector comercial.

El sueño y los negocios

De los trastornos de sueño, hay al menos dos problemas que se presentan como los más comunes: el insomnio y la apnea. En 2016, 1 de cada 5 mexicanos padecía de esta condición, según cifras del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). El año anterior, el mismo organismo apuntó que, de continuar el problema, 40 por ciento de mexicanos lo padecería en algún punto de su vida.

Por la misma razón, como sucede con cualquier otra circunstancia, el mundo de los negocios no se ha quedado atrás. De hecho, en América Latina, resolver los problemas de apnea se ha convertido en uno de los puntos principales de las compañías de salud, enfocando sus esfuerzos en la venta de dispositivos para reducir y tratar este problema.

En 2018, el valor de este mercado estimaba 930 millones de dólares con mira a proyectar un crecimiento de 1.3 mil millones de dólares para el 2023. Y si se traslada a otras regiones, como en la Unión Europea, hay estadísticas similares: de acuerdo con un ­estudio de la OCU, España es el país que más consume ansiolíticos y somníferos, teniendo un crecimiento del 57 por ciento entre 2000 y 2012. Hasta 2010, el gasto en este tipo de medicamentos era de 850 millones de dólares.

Así, el 15 de marzo es el Día Mundial del Sueño, una iniciativa que tiene como objetivo crear conciencia sobre los problemas en la salud debido a los transtornos vinculados al sueño. Lo cierto es que comprender cómo es que este trastorno afecta la jornada cotidiana de las personas en el país puede ser benéfico.

Algunas cifras

En México, el panorama sobre los problema de sueño en las personas no es alentador. Diferentes estudios han revelado que el insomnio no solo es de los más frecuentes, sino que también puede desarrollarse en edades más tempranas debido a la sobre exposición de contenido (el efecto multi-pantalla). 

De acuerdo con la Clínica de Trastornos del Sueño de la Universidad Nacional Autónoma
de México (UNAM), 45 por ciento de la población mexicana tiene mala calidad de sueño, y al menos el 40 por ciento de ellas acude a clínicas por transtornos respiratorios.

Lo anterior quiere indicar una negativa importante sobre dicho panorama: los mexicanos no tienen buen cuidado de los problemas que causa el malestar del letargo soporífero. 1 de cada 3 personas decide actuar, los demás no hacen nada.