Este 21 de enero de 2025, el mundo se une para celebrar una efeméride que, aunque no es tan conocida en comparación con otras festividades, tiene un significado profundo y un origen interesante: el Día Internacional del Abrazo.
Esta celebración, que promueve el afecto, la conexión humana y los beneficios de un simple gesto, fue creada por Kevin Zaborney en los Estados Unidos durante la década de los 80.
¿Cuál es el orígen del Día internacional del abrazo?
La historia de este día comienza con Kevin Zaborney, un psicólogo de la Universidad de Michigan y maestro en teología por la Universidad de Boston.
Observando la sociedad estadounidense de la época, Zaborney notó una tendencia preocupante: la gente mostraba menos afecto en público, incluso con sus propios familiares.
En un momento en que el estrés y la desconexión personal parecían estar en aumento, Zaborney propuso la creación de un día especial dedicado a fomentar el abrazo como un remedio natural para estas problemáticas.
El primer Día del Abrazo se celebró el 21 de enero de 1986 en el pequeño pueblo de Clio, Michigan. Gracias a la inclusión de esta fecha en el Calendario de eventos Chase, una publicación que presentaba todas las festividades locales del año, la idea rápidamente ganó popularidad en los Estados Unidos.
El éxito de la iniciativa fue tal que, con el tiempo, se extendió más allá de las fronteras estadounidenses, convirtiéndose en una celebración internacional.
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Beneficios del abrazo
Los abrazos no solo son una expresión de afecto; la ciencia ha demostrado que tienen múltiples beneficios para la salud tanto física como emocional:
- Aportan seguridad: Desde nuestra infancia, los abrazos nos proporcionan una sensación de seguridad y confianza. El contacto físico es esencial para el desarrollo emocional, especialmente en bebés y niños pequeños.
- Provocan placer: Cada vez que abrazamos o somos abrazados, nuestro cerebro segrega dopamina y serotonina. Estas sustancias químicas no solo reducen el estrés sino que también promueven la calma, la tranquilidad y el sosiego.
- Cubre necesidades afectivas: Según estudios, una persona necesitaría alrededor de 14 abrazos diarios para sentirse completamente querida. La falta de contacto físico puede llevar a lo que en psicología se conoce como “hambre de piel”, una necesidad profunda de conexión humana.
- Disminuye la presión arterial: Las personas que reciben abrazos con frecuencia tienden a tener una presión arterial y una frecuencia cardíaca más bajas en comparación con las que no tienen mucho contacto físico.
- Mejora la funcionalidad diaria: Un abrazo puede ayudar a centrarnos, mantenernos felices y operativos durante el día.
Para las personas tímidas, los abrazos pueden ser una forma de ganar confianza, ser más espontáneas y seguras de sí mismas.
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Celebración del Día internacional del abrazo en 2025
A pesar de los desafíos presentados por la pandemia en años anteriores, el Día Internacional del Abrazo de 2025 se celebra en un contexto donde el contacto físico, si bien aún con precauciones, es más aceptado. Los abrazos, en su sentido más literal o figurado, son promovidos como una forma de reconectar con nuestros seres queridos después de tiempos de distanciamiento.
La celebración en este año se centra no solo en los abrazos físicos sino en gestos de afecto que pueden ser igualmente significativos: un mensaje de cariño, un abrazo virtual o simplemente una palabra amable. En las redes sociales, el hashtag #DíaInternacionaldelAbrazo es utilizado para compartir mensajes de amor y calidez, demostrando que incluso en la era digital, el afecto puede trascender.
Beneficios terapéuticos del Día internacional del abrazo
Aunque el Día del Abrazo tiene sus críticos, quienes argumentan que la demostración de afecto no debería estar limitada a un solo día, la mayoría ve en esta celebración una oportunidad para recordar la importancia de la conexión humana. En un mundo cada vez más acelerado y digital, donde las interacciones personales pueden ser escasas, esta fecha invita a reflexionar sobre cómo podemos fomentar más momentos de autenticidad y cercanía.
El Día Internacional del Abrazo, por tanto, no solo nos recuerda los beneficios terapéuticos de este gesto sino que también nos insta a ser más conscientes y activos en la promoción de la empatía, la compasión y la salud emocional a través de actos tan simples como un abrazo.
