• El mayor beneficiario de esta repartición de bonos fue el CEO de Macy’s, Jeff Gennette 

• Para el directivo de la cadena de retail se otorgaron 3.7 mdd en acciones de la compañía

• Otros directivos recibieron recompensas entre los 350 mil dólares y los tres mdd

Una de las consecuencias más dolorosas de la pandemia ha sido la crisis económica que está afectando casi por igual a todas las empresas, personas e industrias. Mientras que a muchos negocios no les ha quedado de otra que cerrar sus puertas, millones de individuos se están quedando sin trabajo. Esto, porque el consumo se ha desplomado casi a ceros en sectores como turismo, restaurantes y retail. Justo en ésta categoría se suman infinidad de quiebras.

Con este contexto, se pensaría que una retailer que no puede ni mantener en nómina a sus empleados no tendría la capacidad de pagar ni un centavo en bonos a directivos. Pero sería una noción equivocada, al menos en el caso de Macy’s. De acuerdo con Infobae, la cadena de retail habría otorgado a seis de sus principales ejecutivos pagos extra por nueve millones de dólares (mdd). Esto, solo unos días luego de anunciar el despido de casi cuatro mil personas.

En un correo a CNBC, un representante de la cadena de retail apuntó que estos pagos ya estaban programados y corresponden a bonos que se suelen pagar a inicios de marzo. Sin embargo, éstos no fueron entregados en su momento por culpa de la pandemia. Vale la pena recordar que muchos de los directivos que recibieron este pago adicional anunciaron que no recibirían sueldo durante la crisis sanitaria. La recompensa se entregó en la forma de acciones.

¿Hipocresía en el sector retail?

Muchas rivales de Macy’s han tenido que tomar decisiones complicadas para mantenerse a flote. Por ejemplo, Bed, Bath & Beyond anunció que cerrará 200 de sus tiendas en todo el mundo. A finales de junio, Victoria’s Secret dijo que se retiraría de Hong Kong, en buena parte por la crisis socio-política que afecta a la isla. Apple, por su lado, anunció que implementaría un programa de “trabajo en casa” para poder hacer frente al cierre de muchos de sus locales.

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Pero hay que volver a fijarse en la situación de Macy’s. Aunque la compañía ya tuviera su plan de bonos para sus directivos, y nunca tuviera la intención de suspenderlo por la pandemia, se debe de aceptar que es un muy mal timing. No hay ninguna duda que hay una crisis en retail. A la vez, es evidente que no a todos los agentes del sector les afecta por igual. Mientras miles pierden empleo, los directivos “solo” están recibiendo una fracción de sus ingresos millonarios.

El cierre de tiendas y despido de personal es indispensable para la reestructuración de ésta y otras cadenas de retail. De lo contrario, será imposible que puedan sobrevivir en el largo plazo. Pero muchas marcas están perdiendo también la oportunidad de construir nuevos modelos de negocio, más humanos. Podrá parecer una meta innecesaria. Sin embargo, la pandemia ha creado una nueva conciencia entre los consumidores a la que las empresas se deben ajustar.

Las distintas caras de la responsabilidad social

No solo en retail se va a empezar a medir con una vara más alta a las empresas después de la pandemia. También las marcas de bienes de consumo deben pensar cómo interactuar con su entorno, más allá de los usuarios finales y hacia un ecosistema más profesional. También se cuentan elementos como la educación, donde las compañías pueden empezar a hacer una diferencia. Incluso los empresarios, en su papel de individuos, tienen una enorme influencia.

Específicamente en torno al caso de la cadena de retail, algunos expertos han propuesto que la crisis sanitaria sirva de excusa para crear un sistema económico más equitativo. Según el Economic Times, se debe dejar de priorizar la maximización de las ganancias a costa de la vida humana. Para The Guardian, los mismos gobiernos están considerando iniciativas de bienestar que antes eran impensables. Y el NYTimes expone las fallas del entorno actual.