Con tan sólo meses de creado, ChatGPT ya tiene casi dos millones de usuarios y es que en verdad que sí es algo muy innovador en cuestión de Inteligencia Artificial (IA). En resumidas cuentas, se trata de un portal de IA para chatear cuando quieras con un robot y pedirle que te replique textos de lo que quieras todo el tiempo. Yo diría que es como un Alexa meta culto, que en cuanto le vas aportando más, más culto y aparentemente más inteligente se vuelve.
¿Qué es ser inteligente?
Creo en una inteligencia más orgánica, más producto del hambre del esfuerzo y del trabajo. La inteligencia es la capacidad de entender y comprender con experiencia la vida misma. Y esto, por el momento, es complejo que un robot lo pueda desarrollar. Y no lo digo desde el punto de vista de un romántico analógico. Lo grito desde la sensatez racional. Se ha trabajado en la inteligencia racional, pero no en cuanto a las experiencias racionales y emocionales. El día en que se trabaje en esto. Será diferente.
¿Los redactores publicitarios son herramientas caducas?
En una de esas sí, Yo trabajé mucho tiempo como copy y todos los estímulos son bienvenidos para escribir textos. Si no escribirán textos completos, pueden ser de gran ayuda para ejercitar cuartos de escritores o consejos creativos o escuchen esto: Generar metarrazonamientos, ósea, debrayar solo o en equipo. Verbo o acción que nos gusta mucho a los “creativos” de clóset o no.
Entonces, no es el fin del mundo, ni tampoco la octava maravilla del mundo. Es una herramienta más para ejercitar nuestra mente y nuestras ideas. Veo usos elementales para la educación, entretenimiento, creatividad y ludocracia. No por el momento que sustituya a humanos en tareas 100% intelectuales. Así que pare de sufrir. Y empiece a gozar la vida.
Chatear con un robot no es tan malo, es parte de nuestra evolución al siglo 21. Hay que calmarse, aflojarse los cinturones y comenzar a disfrutar. Es platicar con lo que hemos trabajado y con lo que hemos creado, con parte de nuestra cultura. Vivir en el siglo 21 es entender que poco a poco, nos iremos mezclando con nuestro Yo Digital en nuestra Vida Digital. Será parte de nuestro nuevo ADN, la nueva humanidad, la nueva quinta esencia. De los humanos, compuestos o descompuestos de mediados del siglo 21.