Uno de los grandes aciertos de Marvel en el terreno de la mercadotecnia, sin duda es Deadpool. El antihéroe que muchos aman se ha convertido en un peculiar producto que ha resultado en un gran negocio para la franquicia de tiras cómicas.
La producción debut del personaje rojinegro hasta ahora se ubica como la más exitosa del universo X-Men, al recaudar más de 783 millones de dólares, según cifras de Box Office, superando a X-Men: Days of Future Past (748 mdd) y Logan (606 mdd).
Si bien sus cifras quedan muy por debajo de otros éxitos de la franquicia de los superhéroes como Infinity War, lo cierto es que esta producción le ha otorgado al equipo de Marvel, Fox y Disney el distintivo de maestros de la mercadotecnia.
Con esto en mente, y a razón de su estreno mundial, vale la pena hacer un recuento de aquellas lecciones que durante su etapa de promoción previo al estreno dejó la segunda entrega de Deadpool:
Ninguna plataforma se deprecia
Durante su etapa de promoción, el filme protagonizado por Ryan Reynolds utilizó las redes sociales y demás plataformas digitales como un gran motor de promoción; sin embargo, la estrategia reconoció, respetó y capitalizó medios que, muchas marcas, dejan de lado ante la innovación que supone digital.
Dentro de diversas tiendas Walmart en Estados Unidos, las portadas de algunos Blue-ray con títulos tan memorables como The Terminator o El hombre manos de tijera fueran sustituidos por la imagen del personaje de traje rojinegro.
Asociaciones arriesgadas, pero cuidadas
A lo largo de la campaña de lanzamiento, un factor común fue la colaboración de Ryan Reynolds o bien del propio Deadpool con personaje con los que poco tenía que ver, pero que son una referencia para la cultura actual. El caso más claro fue el videoclip grabado con Céline Dion o el uso de la referencia del pintor Bob Rose.
Showtime, Mama. #EffortMaximal #Deadpool2 pic.twitter.com/ZKLrucXJO4
— Ryan Reynolds (@VancityReynolds) 3 de mayo de 2018
Acciones que capitalizan tendencias
Gracias a una carta publicada por el protagonista del filme en la que se informaba el rechazo para que Deadpool se convirtiera en parte del equipo de The Avengers, la cinta recién estrenada logró sacar provecho del éxito de Infinity War.
Una acción simple pero poderosa que metió a la producción en el tema de conversación del momento.
From a guy who never knows when to quit, I’m glad you guys never did. Congrats #Avengers. pic.twitter.com/voJshTKx5E
— Ryan Reynolds (@VancityReynolds) 29 de abril de 2018
Pasiones cruzadas
Un gran acierto de la estrategia fue entender al consumidor desde una óptica global y holistica, hecho que amplió las oportunidades de comunicación con las audiencias desde plataformas diversas y espacios inesperados.
Por ejemplo, durante esta semana un video mostraba al personaje de Marvel adueñándose del Manchester United, uno de los clubes de futbol con más fans en todo el mundo puede ser de gran ayuda.
Continuidad e innovación de la mano
Quizá uno de los esfuerzos que será recordado con mayor énfasis, será el video en el que Deadpool ofrece disculpas a David Beckham, luego de que el polémico héroe se burlara de “voz chillante” del ex jugador de futbol.
El contenido resultó fresco para las audiencias, pero a la vez recordó la primera entrega de la saga, situación que sin duda es un acierto cuando de construir marca se trata.
Little known fact: Canadians are born with a black belt in apology. #deadpool2 pic.twitter.com/CLxPq34PXO
— Ryan Reynolds (@VancityReynolds) 10 de mayo de 2018