Si algo han dejado claro los movimientos de diversas empresas en el mundo en este momento de recuperación, eso ha sido la necesidad de diversificar el negocio con miras a entrar a nuevos territorios para hacer negocio. Vogue parece ser la última en sumarse a la tendencia.

Esta tendencia se ha visto reflejada en diversas marcas que, sin importar su categoría, han tratado de llegar a nuevos clientes con una propuesta diferente a la que les habría de dar posicionamiento y fama.

De ejemplos y casos 

Esta estrategia de diversificación, por ejemplo, ha sido abrazada por Xiaomi, misma que aunque con poca difusión ha permitido a la marca entrar, incluso, en una competencia directa con Amazon en más de un sentido.

Y es que en una suerte por no depender totalmente de la venta de sus smartphones, desde hace algún tiempo, la marca china opera una tienda de comercio electrónico bajo el nombre de Xiaomi Youpin, misma que ofrece un portafolio similar al de Amazon o eBay, aunque por ahora solo dirigido al mercado oriental.

Desde este espacio de venta se ofertan toda clase de productos y ahora, en medio de los nuevos lanzamientos de la marca dentro de este marketplace ha destacado la promoción de unos calzoncillos que prometen entregar una experiencia diferenciada al consumidor gracias a que están diseñados con tecnología espacial para solucionar un problema de fertilidad.

En la misma línea, hace algunas semanas se dio a conocer que Zara anunció que habría lanzado la línea “Stationery”, la cual hace referencia a una sección de papelería que llega al mercado con una pequeña colección que incluye bolígrafos, blocs de notas, organizadores y set de lettering, entre otras cosas.

Nuevo competidor en moda 

En este tenor, Vogue parece ser la última marca en sumarse a un proceso de diversificación. Y es que la reconocida publicación de Conde Nast acaba de anunciar el lanzamiento de su primera colección de ropa.

Esta propuesta ha llegado al mercado bajo el nombre Vogue Collection e incluye una serie de prendas atemporales con distintas versiones de su reconocido logo, el cual luce bordado o impreso en propuesta que se compone de sudaderas, camisetas, playeras y prendas enfocadas al sector de deportes y comfy.

Esta propuesta parece tener éxito probado. Hacia 2019, en medio de la celebración del 40 aniversario de Vogue Alemania, la estilista Veronika Heilbrunner creó una colección de edición limitada para conmemorar la ocasión. 

En aquel momento, esta línea reportó importantes ventas y esto ha motivado a que la fórmula se replique con ediciones como British Vogue, Vogue París o Vogue Italia, lanzando cada una su respectiva e-commerce en cada país.

¿Buen momento para la apuesta?

Aunque no e sea primera vez que Vogue prueba sumarse al mundo de la moda, lo cierto es que ahora mismo la idea a plantearse es el momento en el que esta apuesta llega.

Y es que no podemos perder de vista que el mundo de la moda queda especialmente fracturado con la llegada de la pandemia.,

En medio de la etapa de confinamiento, un reporte de GlobalData, revelaba que el gasto global en la industria minorista caería un 3 por ciento durante 2020, equivalente a aproximadamente 549 mil millones de dólares.

En ese sentido, vale la pena citar datos del US Census Bureau, los cuales advierten que la categoría con la caída más fuerte en ventas ha sido la de ropa y accesorios, con una contracción de ventas de 78.8 por ciento; seguida de electrónicos, que ha tenido una contracción en ventas de 60 por ciento; mientras que la categoría de muebles y accesorios para el hogar ha visto una contracción de 58 por ciento.

De esta manera, y entendido la complejidad que para el negocio suponen estas cifras, las marcas de moda a lo largo y ancho del mundo se han visto obligadas a reinventarse.