Por Alan Campos
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Normalmente cuando pensamos en la NFL se nos viene a la mente una de las ligas deportivas más importantes del planeta, no sólo a nivel deportivo y espectáculo, sino también a nivel marketing (tan sólo hace falta ver la cantidad de comerciales que patrocinan sus grandes súper estrellas como Peyton Manning o Cam Newton); sin embargo, ocasionalmente dentro del futbol americano profesional también se cometen graves errores, siendo el último de éstos Johnny Manziel.
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Recuerdo perfectamente cuando a finales del año pasado comenzaba a hablarse dentro de la NFL de un joven quarterback de Texas A&M, quien supuestamente estaba destinado a convertirse en la próxima gran figura de los emparrillados, y aunque yo nunca estuve convencido de dicha afirmación muchas firmas parecieron creerlo así a ojos cerrados, pues aún sin jugar un solo partido como profesional marcas como Snickers, Nike, Panini, Nissan o McDonald’s.
El efecto Manziel incluso se vio reflejado de manera inmediata para los Browns de Cleveland tras el Draft (pese a haber sido la selección global número 22), quienes lograron vender una cantidad bestial de abonos de temporada en las 24 horas siguientes a la selección del pasador.
El revuelo alrededor de Manziel fue tal que incluso disputas legales se desataron a lo largo y ancho de toda la Unión Americana luego de que algunas personas intentaran registrar marcas como “Johnny Football” (sobrenombre con el que se conoce al joven QB), “The House That Johnny Build” o, en tiempos más recientes, “Johnny Benchwarmer”, todas ellas buscando lucrar con la fama del jugador sin su permiso.
Como sea, la temporada debut de Johnny ha llegado a su final (luego de lesionarse durante el partido del domingo pasado ante los Panthers de Carolina) y debo decir que no me encuentro impresionado en lo absoluto, es decir en 5 juegos (2 de ellos desde el inicio) el quarterback se las ingenió para completar 18 de 35 lanzamientos para un total de 175 yardas, con 2 intercepciones, 3 capturas y un fumble, números nada envidiables para una futura leyenda del futbol americano.
Es claro que no se puede juzgar el futuro de Johnny Manziel basado en su desempeño durante su primera temporada como profesional; sin embargo, si una cosa está clara es que en estos momentos Johnny Football se encuentra más cerca de emular a Tim Tebow (genial mercancía, pésimo quarterback) que a Joe Montana, por lo que tiene una ardua labor para demostrar que es mejor quarterback que mercancía.