Paco X. Estoy muy indignado como muchos por la derrota de la selección mexicana frente a EE.UU y muy probablemente no asistiremos el próximo mundial, ¿qué paso ayer? ¿Qué está pasando y cómo nos afecta?
Anaí Y. Lo que pasó ayer fue solo un síntoma de lo que está sucediendo dentro del equipo, dentro de una organización que está cruzando a través de una crisis terrible. Lo que vimos ayer, es la punta del iceberg de un gran problema. Además de millones de pesos perdidos, el tema más importante es que nos afecta en el ánimo a todos nosotros. ¿No te sientes desanimado?
Paco x. Y mucho, hay una duda que me mata, ¿qué tanto es culpable la mercadotecnia en todo esto?
Anaí Y. Gran culpa. La mercadotecnia nos hace desear, querer y subir nuestras expectativas. Nos aceleramos, y damos por hecho que estamos dentro del mundial. En nuestras mentes, ya estamos allá, ya estamos comprando la idea y lo que está a su alrededor. Traz! Desilusión tras desilusión. El negocio del fútbol está anidado en gran parte en la mercadotecnia, y por lo mismo es quién toma la batuta en cada campaña. ¿Qué tanto ayuda y qué tanto distrae?
Paco x. ¿No crees que inflamos mucho con patrocinios a los seleccionados que ganaron el mundial juvenil en 2005, que les quitamos su hambre de jugar y sudar la camiseta sin ganar dinero o recibir una remuneración ?
Anaí Y. Totalmente de acuerdo, el objetivo se convirtió en ser portada de todos lo medios al ser embajador de las marcas que se quieren colar al mundo del deporte. El verdadero juego bajó de prioridad. Ahora, la selección de México no es la única que tiene patrocinios inflados, pero, ¿por qué si es al único que le afecta de esta manera?
Paco x. Mentalidad, autoestima, cultura, identidad o complejo de inferioridad. Esto es muy complejo, estamos estimados a sentirnos siempre inferiores, somos un país de wannabes, que cuando sentimos que ya llegamos nos olvidamos de nuestro país.
Anaí Y. ¿Cómo creérnosla de nuevo? ¿Cómo regresar a querer trabajar por nuestro país? Yo creo que el fútbol, más que un deporte como tal, es un factor que en México nos mueve, y nos mueve a todos. Para cambiar el estado anímico de nuestro país, que se contagia como un virus, buscaría que el fútbol fuera el centro de mi estrategia social. ¿Qué pasa cuando la selección gana torneos importantes? México se mueve. Imagínate si ganaran un torneo de tal impacto como el Mundial, ¿nos levantaría el ánimo?
Paco X. Quizá, sí , pero el problema es que la mercadotecnia está actuando en contra de sí misma, si no hubiésemos inflado tanto a estos muchachos seleccionados, quizá ahora les importaría jugar para su país y como no, ahora ya nos quedamos sin presupuestos de publicidad, campañas y patrocinios por 600 MDD. Nada para nadie.