Faltan 15 años para que sea invierno en el 2038. Seguro muchas cosas serán diferentes y otras seguirán siendo iguales. De lo que estoy seguro es que la vida digital implicará que seguiremos consumiendo contenido a todo momento. Desde que nos levantamos de la cama, cuando vamos al baño, hasta que volvemos a la cama cansados de devorar más contenido. Pareciera que no vivimos de agua, más bien de contenido. Eso parece pero la realidad es que esta vida posmoderna nos trae inmersos en vivir de lo que no es orgánico, más bien de lo digital que corre cada vez más por nuestras venas.
¿Será que la vida perderá su balance y todo será digital?
Aquí mi pronóstico, con todo respeto para Mhoni Vidente. Los humanos necesitamos de vínculos para sobrevivir en la sociedad, si no estamos condenados a dos cosas: A la muerte, porque nos aíslan, y al leprosario, que es donde están los otros los que no embonan en la sociedad. Ante la pregunta que muchos tienen ¿En quince años estaremos 100% conectados online y al metaverso? No, necesitamos de los vínculos offline para sobrevivir y le exacta medianía y equilibrio entre lo offline y online es el éxito entre una vida sana y el futuro perfecto y la estabilidad emocional. Nuestro cerebro no puede y no está diseñado para estar 100% en un solo lado aislado, sólo en lo offline o alienado, todo en lo offline. Con la Pandemia del 2019, los humanos y su cuerpo, son tan sabios que compensamos, fuimos capaces de generar vínculos con otros a través de la parte online, pero esto generó patologías serias en niños y adultos, sin embargo, lo logramos. Al fin y al cabo, necesitamos abrazos, apapachos y besos para seguir viviendo. Agua en vez de contenido.
¿Qué pasará con los centennials y su vida digital?
Hoy, todas las generaciones estamos conectados. Mañana y en 15 años, marcas y experiencias venderán estar desconectados online. Algo así como que te costará estar desconectado de todos tus dispositivos y vivir experiencias análogas. Será pagar un lujo. Por todo esto. Estar desconectado será un lujo. Las marcas lo venderán como una détox de la vida digital y los que en este siglo 21 nacieron en el 2000 pagarán muy caro el respirar, sentir, observar, y vivir con los cinco sentidos lo que pasa a su alrededor offline.
Las experiencias offline serán enriquecidas por la coyuntura que rodea al mundo en la actualidad y en el futuro. El hiper contenido, la hiper información y el pseudo contenido debilitarán a las audiencias del mañana por lo mismo, cansados de ver y consumir tanta chatarra, buscarán nuevo contenido real y analógico. Las audiencias no son tontas y no las podemos engañar con contenidos chatarra. Se agitan de consumir lo que no es real. Por lo mismo, la gente nueva y joven, buscará nuevos contenidos y desconectarse, aunque les cuesta más y sea complejo.