• Previo a esta regla, ya el 73 por ciento de las propiedades de Airbnb ya prohibían que se celebraran fiestas en el lugar

• Sin embargo, algunos espacios se ofrecían específicamente para algunos eventos “masivos”

• Entre los más populares están los baby showers  o hasta fiestas de cumpleaños infantiles

Todas las compañías de tecnología tienen restricciones para los usuarios en la forma en la que se usan sus servicios. El objetivo de estas reglas, por supuesto, es evitar que ciertos usuarios generen un ambiente negativo para el resto de la comunidad. O bien, que se causen daños a los bienes físicos que pueden estar en juego dentro de ciertas plataformas. Pero en muy pocas ocasiones las consecuencias llegan a tener repercusiones legales, como en el caso de Airbnb.

De acuerdo con Reuters, la compañía colaborativa de renta de hogares y habitaciones acaba de pasar una serie de reglas estrictas en el marco de la crisis sanitaria que afecta al mundo. A pesar que se tomaron medidas sanitarias con sus aliados para la limpieza de los espacios, a la compañía le preocupa que sus espacios se conviertan en factores de transmisión. Así pues, la tecnológica ha decidido tomar una decisión radical: Prohibirá terminantemente las fiestas.

Ya no será posible alojar más de 16 personas dentro de una misma casa o espacio dentro de su plataforma. Aquellas cuentas que no acaten las reglas de Airbnb no solo serían expulsadas de la comunidad. Incluso se podrían enfrentar a una demanda de la compañía. Como parte de estos cambios, la empresa retirará opciones y filtros como “Fiestas y eventos permitidos” o “Event friendly”. Esta prohibición aplicaría a escala global en todas las futuras reservaciones.

¿Una mala decisión de Airbnb, considerando su IPO?

En el sector turismo se han tomado medidas radicales para reducir la posibilidad de volverse un factor de contagio masivo. Algunas marcas están ofreciendo pagar a ciertos clientes para que vayan a los destinos más populares a reactivarlos. Varias aerolíneas están tratando de crear confianza entre los usuarios mediante consejos sanitarios. Y como Airbnb, grupos de hoteles y marcas de viajes están definiendo sellos y nuevas medidas de seguridad sanitaria.

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Hay que regresar a la decisión de Airbnb. En términos sanitarios, se trata de la mejor decisión posible. La tecnológica ha tenido la fortuna de recuperarse con mayor velocidad que otras compañías de la industria del turismo. Realmente no necesita que una de sus habitaciones o casas se convierta en un foco de infección, especialmente cuando acaba de presentar todos los papeles de su debut bursátil. Al mismo tiempo, por esta misma razón podría ser mala idea.

No se puede negar que hay un nicho valioso de consumidores que contrata los servicios de Airbnb precisamente por la capacidad de hacer fiestas y eventos. Si bien es prudente ejecutar una prohibición temporal, la medida de demandar a los propios clientes parece excesiva y algo que podría afectar su imagen. Probablemente habrá pocos casos, si llega a haber alguno, que llegue a ese nivel. Pero no deja de ser un riesgo en la integridad de la reputación de la marca.

Proceso delicado en el camino a la IPO

Resulta fundamental que Airbnb cuide cada paso hacia su debut a la bolsa, en especial con los precedentes desalentadoras de otras Ofertas Públicas Iniciales (IPO). Ahí está el caso de Uber, otras empresa de la economía colaborativa, que desde el segundo día en la bolsa ya estaba registrando pérdidas millonarias. Algo que también le sucedió poco antes a la rival Lyft. De hecho, ambas tuvieron un desempeño tan malo, que se quedaron al frente del mercado.

También es importante mencionar que los expertos tienen visiones encontradas sobre cómo le va a ir a Airbnb en su IPO. De acuerdo con IG, aunque su valuación no será tan alta a la que se tenía en 2019, será una de las más altas de la industria de viajes y turismo. Barrons, por su lado, señala que agentes como Goldman Sachs y Morgan Stanley se han negado a comentar, lo que ha causado nerviosismo. Y Value The Markets parece esperar un fracaso significativo.