La selección mexicana de futbol resulta ser un imán de aficionados y por ende, de las marcas, prueba de ello es que es uno, o quizás el único, representativo nacional del mundo que cuenta con dos mercados abundantes, uno de ellos es el territorio nacional, mientras que el otro es uno de los países más anhelados por cualquier institución deportiva fuera de ese país, nos referimos a Estados Unidos.
El vecino país del norte es uno de los territorios en el que el futbol pretende posicionarse como uno de los deportes top dentro de la población de ese país; por ello no es casualidad que el centenario de la Copa América realizada en 2016 se haya disputado en Estados Unidos, además de que haya vivido un clásico de España entre el Barcelona y el Real Madrid en pretemporada en Miami y ante 70 mil asistentes, o que la Champions League vea en Nueva York una posible cede de la final del máximo torneo de clubes en el planeta, y por si fuera poco, sea el país con mas sedes para la candidatura del mundial de 2026 junto con Canadá y México.
A todo ese modelo de negocio que aspiran equipos, competiciones y organizadores en el mundo, el representativo nacional accede gracias al marketing de nostalgia, según datos de Pew Research Center, en la Unión Americana durante 2016, la cantidad de latinos era de 55.2 millones de personas, de las cuales, el 63 por ciento son de ascendencia mexicana.
Otra prueba de ello, son los partidos “moleros”, término que otorgó Ricardo Ferreti a los juegos de la selección mexicana en Estados Unidos ante equipos de menor envergadura, y que solo generan recursos para las arcas de la Federación Mexicana de Futbol. Desde 2002, la Femexfut celebra contratos con la empresa SUM para la realización de encuentros en el vecino país del norte, de acuerdo con proyecciones de El Economista, desde ese año (2002) a la fecha, se estima que se han recaudado alrededor de 400 millones de dólares bajo este concepto.
Además de que según datos de la misma federación, se indica que durante cada proceso mundialista, el conjunto azteca genera rendimientos por 250 millones de dólares, de este total, 170 millones provendrían exclusivamente por patrocinios.
En México, la selección nacional cuente con 96.4 millones de fanáticos; que el 79 por ciento de la población identifique al equipo y que 61.7 millones de personas tengan una opinión positiva del tricolor, además de que provea de más de 20 puntos de audiencia a Televisa y Azteca durante sus transmisiones de los partidos.
Mientras que en Estados Unidos, su número de seguidores sea de 40 millones; al tiempo que genera 3.2 millones de personas en promedio de televidentes en los partidos, y de que tenga una asistencia promedio por partido de 59 mil aficionados en dicho país.
Por tal motivo, los jugadores que integran a la selección nacional, son perfectos embajadores de marca para cualquier producto que deseen promocionar; debido a esto, el Consejo de Promoción Turística de México (CPTM) pagó 34 millones 800 mil pesos para que las figuras del plantel como Carlos Vela, Andrés Guardado, Javier Hernández, Héctor Herrera y otros seleccionados atraigan viajeros mexicanos extranjeros, además de que sean un canal para que se hable bien de México.
Amigos.. Los invito a que sigan la cuenta @yosoymexicano en donde está semana estaré compartiendo un poco de mis inicios, familia y más ??
— Héctor Moreno (@HectorMorenoh) 4 de octubre de 2017
De acuerdo con El Heraldo de México, dentro del contrato se develó que “los jugadores se la Selección Mexicana de México son grandes figuras que son líderes de opinión dentro y fuera del país, por medio de ellos podemos llevar mensajes del CPTM a diferentes puntos para impulsar a que la gente visite nuestro país.
Según el medio, uno de los ejes de la alianza está el programa de embajadores, una estrategia que permite disponer de jugadores para promocionar al país, sus destinos, cultura, gastronomía y modernidad.
Por lo que, de manera trimestral, la Femexfut comprometió la presencia de jugadores en mensajes que propicien que los mexicanos hablen bien de México. De igual forma, se llevará a cabo una campaña digital bajo los hashtags: Cuando jugamos #SomosMéxico. Cuando apoyamos #SomosMéxico y Cuando mostramos lo mejor que tenemos #SomosMéxico.
Aunado ello, el consejo de promoción puede colocar la marca México en la parte superior trasera de diferentes uniformes con los que el combinado nacional desarrolla actividades que no sean los partidos, como lo son playeras de entrenamiento, descanso y de viaje.