¡Más rápido, más alto, más fuerte!
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Así invoca el lema de los Juegos Olímpicos y el Movimiento Olímpico, floreciendo como un llamado a los atletas a que se esfuercen por la excelencia personal en todo lo que hacen.
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Tal como en el ámbito olímpico, en el organizacional también se contemplan nueve fuerzas motoras que alumbrarán nuestras acciones.
Una fuerza motora en el ser humano tiene cuatro características que son: fuerza, resistencia, rapidez y flexibilidad, es en este sentido en el cual queremos reflejar la fuerza motora de las Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) que tiene que ver con dos cuestiones:
- Primero que los participantes en las organizaciones, tengan claridad y estén alineados al marco estratégico que está compuesto por la misión, visión, valores, propósito y objetivos.
- Segundo que concurra un introspectivo sentido de gestión de gobierno, de servicio al cliente, de liderazgo y de organización.
Sirva esta preámbulo para presentar en esta colaboración nueve fuerza motoras que de cumplirse consiguen ser un blindaje, que con fuerza, resistencia, rapidez y flexibilidad, (complementadas con dos capacidades indispensables en el trabajo colaborativo: la coordinación y el equilibro por parte de un efectivo liderazgo), lleven a un camino de eficiencia, eficacia, calidad y calidez en los servicios y productos que ofrezcan las OSC a sus públicos objetivo o también identificados como “stakeholders”, siendo las siguientes:
1.Dar a nuestros asociados o voluntarios lo que ellos necesitan. En dicho sentido Peter Drucker, nos da una encomienda, que en sí misma es la primera fuerza motora de cualquier colectividad: “Dar a tus clientes lo que ellos necesitan”.
Para poder acceder a las necesidades de los asociados y sus organizaciones, hay que conocerlos y convivir con ellos, tener un perfil definido de nuestro voluntario o asociado.
2. Hacer solamente lo que hacemos mejor, es decir, participar con nuestras fortalezas. Para satisfacer el espectro total de necesidades de los asociados, más allá de las capacidades más dinámicas, podemos colaborar con otros jugadores, algunas veces con aquellos a quienes consideramos competidores, quienes pueden complementar nuestras fortalezas con lo que ellos hacen mejor.
3. Poner a la persona al centro del relacionamiento, del networking y trabajo colaborativo. Esto se logra mediante el impulso y motivación a los voluntarios o asociados como grupo y a cada uno como persona única e irrepetible, y de esta manera, construir una sólida red fortalecida con el llamado “networking” y consecuentemente el trabajo colaborativo lo que permitirá consolidar espacios de relación consistente en la vida de la asociación, haciendo énfasis en que la necesidad y forma de relacionarse exitosa y productivamante de una persona con otras es el centro de este planteamiento.
El networking , es la estrategia que consiste en crear una red de contactos profesionales con gente que tiene intereses similares a los nuestros. Esta estrategia permite crear sinergias y oportunidades de todo tipo con personas que tienen aspiraciones similares a las nuestras.
Hoy día se deberá considerar que en las asociaciones y en las organizaciones en general llegan a convivir de tres y hasta cuatro generaciones, producto de:
- La llegada de jóvenes muy jóvenes altamente capacitados para enfrentar retos organizacionales, administrativos, financieros con conocimientos y habilidades tecnológicas informáticas y digitales.
- Mayor permanencia laboral y funcional de la generación de adultos de la tercera edad, producto de la ampliación de la esperanza de vida y su lógica necesidad de seguir siendo productivos por cuestiones culturales, sociales, económicas o anímicas.
Complementaríamos estas reflexiones de Peter Drucker, señalando que habrá que diseñar productivos planes y programas de atracción, retención y motivación que atraigan a asociados o voluntarios de acuerdo a su perfil, que cubran los principíos basicos y abarquen los medios de comunicación precisos para poder acceder al público objetivo a nuestros “stakeholders”; esos principios se resumen en el acrónimo “POETA”, el cual se describe en la siguiente imagen:
4. Trato personalizado: presencial y/o virtual. El trato “cara a cara” es una fuerza motora de los OSC. Hoy día las acciones digitales nos permiten reforzar la acción presencial y potenciar las estrategias a través de poderosísimas acciones personalizadas vía Internet, sin substituir la importante y necesaria presencia física.
“A menudo lo olvidamos, pero las asociaciones están hechas de una materia prima esencial: las personas que lo integran” Korazza
5. Adaptarse a los tiempos de transformación digital. Hoy día como el ayer la inapreciable manera de activar el conocimiento y convivencia con nuestro público objetivo, es y seguirá siendo a través del trato “cara a cara”, y como acción imprescindible es apoyarse con la transformación digital para el aporvechamiento de todo potencial de conexión y comunicación de las herramientas digitales como lo son: la nube, código abierto, inteligencia artificial, Machine Learning, etc.; dicha transformación es una exigencia para contar con la participación de las nuevas generaciones; no se puede seguir teniendo voluntarios, asociados o agrupaciones empresariales, filantrópicas y profesionales únicamante en un mundo analógico, de lo contrario irán desapareciendo sin ser notado, convirtiéndose en simple vapor.
6. Fortalecer el Capital Relacional. Los OSC y en general las asociaciones profesionales que cimenten su fuerza y resultados productivos en sus redes sociales presenciales y virtuales (vía web), en un trabajo profesional, orientado a las personas, con objetivos bien definidos, estrategias, tecnología y administración adecuada, alcanzarán grandes beneficios y podrán generar y fortalecer su gran conexión y el capital Relacional lo que lo convierte en un valor sustancial en dichos organismos.
7. Apertura para escuchar, flexibilidad para modificar, rapidez para implantar. La gran virtud de los organismos profesionales no es únicamente estar abiertos a escuchar visiones, nuevas ideas, etc. sino en provocar que esa cualidad vaya más allá y se convierta en una tarea permanente de investigación con mirada a la innovación, creatividad y voluntad de las personas por participar.
Provoquemos a los dirigentes de los OSC a ir a la necesaria transformación apoyados en la tecnología digital como una opción favorable, y qué mejor que a través de sistemas de redes sociales corporativas vía web; éstas sin lugar a dudas potenciarán entre otras áreas o actividades a la comunicación, la representación, la relación geográfica sin barreras, sin restricción alguna, salvo las que el organismo establezca.
8. Asociar, desarrollar, representar con enfoque integral.
- Asociar es por lógica el elemento básico para que surja una agrupación ya que es una condición necesaria, permanente para un crecimiento continuo que dará sustentabilidad sin descuidar el ser excelentes en la retención.
- Desarrollar es el beneficio que espera dar la agrupación y recibir al asociado y/o cualquier persona que se acerca por interés profesional al organismo.
- Representar es otro valor que debe dar la agrupación y debe percibir tangiblemente el asociado y sus empresas. La representación ante autoridades gubernamentales, federales, estatales y si es el caso también municipales, lo que se constituye como una fuerza y un gran valor que pueden ofrecer las OSC.
- Enfoque integral, en el que todos los actores que tienen que tomar decisiones tengan una comprensión compartida con otros actores de la situación con el fin de facilitar su decisión.
9. Gestionar con niveles altamente profesionales.
Los OSC deben presentar resultados en su gestión, para lo cual han de tener las mejores prácticas en materia de la administración de sus recursos, económicos, humanos, financieros y comerciales siempre con la mira puesta en el parámetro por excelencia que es y será: transformar la vida de las personas y consecuentemente de las organizaciones.
Reflexión
Estamos ciertos que estas nueve fuerzas motoras generarán motivación a la participación, solidaridad orgánica y cohesión de grupo, seguidamente darán identidad y fortalecimiento al sentido de pertenencia.
El compromiso social es un saldo a favor que espera la sociedad cuando un grupo de profesionales responsables de voluntarios o asociados unen esfuerzos y talento para buscar ser mejores personas y ciudadanos y por ende disfrutar de un mejor país, para esto habremos de comprometernos como los deportistas de alto rendimiento, que además de vivir lo que hacen con pasión, llegan a ser en su mayoría: íntegros, ambiciosos y altamente competitivos.