México, D.F.- Es lógico pensar que el clima cálido que trae consigo la Primavera modifica los hábitos de consumo, siendo las bebidas las primeras en cobrar importancia en los hogares aunque de formas distintas.
De acuerdo con una investigación de Kantar Worldpanel México, en 2012 el agua incrementó su consumo un 8 por ciento con respecto a 2011 al pasar de 385 a 416 litros por hogar. El consumo de litros de cerveza aumentó 14 por ciento en comparación con la primavera de 2011, gracias a que los hogares consumieron un litro más en promedio.
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Cabe señalar que desde marzo la cerveza aumenta su consumo, aunque no tan fuerte como en verano o diciembre. El consumo de refrescos en botellas grandes aumenta cuando los niños están de vacaciones y en hogares con adolescentes, mientras que las botellas chicas también ven crecer sus ventas ya que la gente suele comprar en promedio una de ellas a la semana. Gracias a ello, el consumo de esta categoría creció de 29 a 31 litros en 2012.
El té helado, los jugos y las bebidas en polvo también empiezan a destacar en esta época estacional, aunque su mejor momento es el verano. La leche en polvo es adquirida por habitantes de zonas muy cálidas que no desean arriesgarse a que la leche fresca “se corte”.
Las bebidas calientes como el chocolate de mesa y el café pierden la importancia que tenían en invierno, a diferencia de los helados y las paletas que tienen una buena temporada de marzo a agosto y son mayormente consumidos en hogares con niños entre seis y doce años.
¿Qué ocurre con otros productos?
Durante la primavera, la mayonesa y los postres refrigerados como gelatinas y flanes aumentan en los hogares, en contraste con las sopas, la leche condensada y los untables como margarina, mantequilla, mermelada y cajeta, que bajan su consumo. El consumo de productos light disminuye en marzo, pero vuelve a repuntar en verano.
En cuanto a la categoría de cuidado personal, el calor ocasiona que se compren más cremas corporales y bronceadores para los asiduos a la playa. Por el contrario, el uso de tintes y modeladores de cabello disminuye, al igual que el maquillaje.
Etos resultados fueron obtenidos a partir de una encuesta realizada a ocho mil 500 hogares ubicados en las ciudades de Mérida, Tijuana, León, Puebla, Distrito Federal, Guadalajara y Monterrey.
