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En 2018, Elon Musk dijo que había asegurado 72 mil mdd en financiamiento para conseguir que Tesla fuera de nuevo privada
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La SEC consideró este tipo de comentarios como un daño a los inversionistas, y obligó al empresario a prometer cambios
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Sin embargo, ahora un inversionista quiere que se le paguen daños porque el ejecutivo no ha cumplido con su promesa
Una vez más, la actitud irreverente de Elon Musk ha puesto a Tesla en una posición legal muy incómoda. De acuerdo con Reuters, un inversionista de la automotriz acaba de presentar una demanda en contra del empresario sudafricano. A su parecer, el ejecutivo está violando el trato al que llegó con la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) de Estados Unidos (EEUU) en 2018. Y en específico, cree que el directivo sigue sin tomarse en serio el uso de su cuenta de Twitter.
La queja fue presentada ante una corte en Delaware. Según el inversionista, Musk muestra un comportamiento “errático” en el uso de su cuenta de Twitter. También acusa a la junta directiva de Tesla de no ponerle un alto a su líder ni obligarlo a seguir el trato con la SEC. A su parecer, ambas actitudes le están costando miles de millones de dólares (mdd) en pérdidas a todos los accionistas de la empresa. En este sentido, está exigiéndole a los ejecutivos el pago de daños.
En 2018, la SEC amonestó a Tesla y Elon Musk después que éste publicó en Twitter que había considerado sacar a la automotriz de la bolsa de valores. Para septiembre, las organizaciones acordaron que se pagaría una multa de 20 mdd. Asimismo, el empresario sudafricano aceptó que los abogados de su compañía revisaran y, en su caso, vetaran algunas publicaciones. Sin embargo, el inversionista de la demanda señala que se ha dejado de controlar al empresario.
Los problemas de Tesla
No es un buen momento para que la automotriz de Elon Musk enfrente un proceso legal. La compañía recientemente se desplomó en valor dentro de la bolsa de valores. De acuerdo con Hypebeast, hace dos semanas habría caído en un 25 por ciento. En su momento, se ligó esta tendencia con el descalabro que sufrió el Bitcoin al mismo tiempo. Esto, porque Tesla adquirió una larga suma de la criptomoneda para poder empezar a aceptarla como método de pago.
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También se puede trazar una conexión directa entre el mal desempeño de Tesla y algunos de los comentarios de Elon Musk. De acuerdo con Yahoo, el empresario sudafricano ha sido uno de los mayores promotores del Bitcoin, presumiendo la moneda como algo mejor que el dinero tradicional. Poco después, en datos de Insider, el mismo ejecutivo aceptó en Twitter que la valuación de esta y otras criptomonedas era muy alta, afectando los intereses de su compañía.
A eso se debe sumar que, en datos de The Driven, Tesla está enfrentando otros problemas más reales que los comentarios de su CEO. Como otras empresas en el sector automotriz, la compañía de Elon Musk está viéndose afectada por al escasez de componentes para producir sus modelos. Varias fábricas en EEUU tuvieron que suspender temporalmente operaciones por la falta de partes. Algo que podría poner en jaque sus promesas de mejorar la producción.
Cuando un CEO es también un influencer
A pesar de los problemas legales que ocasiona, el estilo irreverente de Elon Musk es parte del encanto de Tesla. El empresario sudafricano ha usado con gran eficiencia estas publicaciones para burlarse de sus rivales en redes sociales. Sin ir más lejos, en 2019 lanzó un ataque contra Porsche que se hizo viral rápidamente. La popularidad del directivo y de su compañía gracias a estas iniciativas podrían explicar, en parte, su masiva valuación dentro de la bolsa de valores.
También es claro que otras marcas reconocen el efecto que tiene Elon Musk en la población porque ya algunos otros CEO han tratado de imitar el estilo del líder de Tesla. Por ejemplo, el jefe de Volkswagen se unió a finales de enero a Twitter. Y su primera publicación fue un ataque directo al empresario sudafricano y su negocio automotriz. Un movimiento que fue visto por todos los agentes del mercado como un intento por imitar el éxito viral de este ejecutivo.