Un grito desesperado a través de los medios
En nuestros países latinoamericanos es y seguirá siendo cosa de todos los días hablar, escuchar, leer, etc., acerca de los perdurables crímenes callejeros, pero hay algunos que en particular cimbran el espíritu de la sociedad y le arrancan un grito desesperado; estamos hablando de la violación de una menor de edad, en Boca del Río, Veracruz, México, por un grupo de jóvenes juniors delincuentes identificados como “Los Porkys”.
He leído y seguido el proceso paso a paso, he participado activamente investigando el caso, a través de los medios impresos, electrónicos y digitales, cuya actividad ha sido tan aguda que la violación a la menor se comenta y debate en la calle de cualquier ciudad de la república mexicana, no digamos en Veracruz.
Los vacíos de jurisdicción, de poder e información alguien los llenará
Como todo caso que quebranta la ley, los involucrados presentan sus argumentos, ante las autoridades. En primera instancia es ante el Ministerio Público, para pasar luego a la fiscalía, pero cuando ésta, al parecer, no es capaz de participar con prontitud, y conforme a derecho, por razones de incompetencia, de ilegalidad, o por favorecer a algunas de las partes, se genera un vacío de jurisdicción, quedando a la deriva la impartición de justicia y potenciando un vacío de información.
En este caso los vacíos de poder y de información alguien, la sospecha y/o suspicacia los llenará. Por vacío de información se entiende una situación comunicativa en la que la información sólo la conoce uno o algunas de las personas y/o públicos directamente involucrados y/o afectados. De esta manera se estimula a que el centro de la batalla, en materia de información, se libre a través de los medios.
El gran disparador de la denuncia
Estamos seguros que, hablando de medios de comunicación, un disparador de toda esta esquizofrenia mediática ha sido la Web, a través de las redes sociales, sin dejar de puntualizar que en realidad el gran disparador, es resultado de la desesperación de un padre afectado, producto de la indolencia de la autoridad.
En este caso de los violadores Los Porkys, no ha habido medio que no haya abordado el tema:
Ha llegado a ser un argumento de editoriales y editorialistas nacionales e internacionales.
La red ha mostrado su músculo
Para ser muy precisos en cuanto al impacto de los medios de comunicación, la Web, a través de las redes sociales, una vez más, ha demostrado su músculo, propuestas como Change.org ha tomado un lugar muy importante en las consideraciones de los analistas y de la opinión pública, casi doscientas mil firmas se han alcanzado en este medio de censura.
El linchamiento en la red se puede revertir hacia la calle
Casos como el de los violadores identificados como los Porkys, que deben ser acotados, investigados y sancionados por la acción de la ley, – ante la no acción oportuna de las autoridades- hoy día se convierten en lugar de batalla y factible linchamiento de los participantes, culpables o no, así como de los directamente afectados, en este caso de la joven violada y sus familiares.
Estos días funestos, impregnados de entonaciones políticas, son caldo de cultivo para la manipulación y el rumor, que es, el enemigo público número uno; el rumor se puede generar por ignorancia y/o de manera cándida, por supuesto en forma premeditada, esto a través de un artículo, un simple comentario, o una imagen, hoy reforzado con los llamados “memes”. Puede ser también que se copie información y/o imágenes de terceros y se distorsione; asimismo, se puede producir todo esto y más por nuestra cuenta.
Antídoto que generará acción civil por parte de la sociedad
Hoy día con las nuevas tecnologías informáticas, digitales, vía internet, todos tenemos la oportunidad de debatir abiertamente y también de convertirnos en “reporteros de la red”; ello consiste, desde generar nuestra información y/o copiar, reproducir o hasta falsear información de internet, para esta tarea de “reportero ciudadano” existe un antídoto llamado ética y conciencia.
Construyamos una sociedad informada adecuadamente, desatemos debates fundamentados en verdades y no en rumores o verdades a medias, bastante tenemos con la información generada intencionalmente por grupos mafiosos y de pseudo firmas de mercadotecnia, centros telefónicos, u otros actores del medio de la comunicación poco éticos. La sociedad civil, los cientos de miles de personas que somos, podemos cambiar esta forma de comunicar, involucrar a otros y eliminar el rumor que provoca en la mayoría de los casos, reacciones hostiles e injustas, pero también, como sociedad tenemos la oportunidad de ser la fuerza motora que elimine la injustica y la acción o no acción de los gobernantes.
El grito desesperado de un padre
León Krauze, periodista que conduce los noticieros de Univisión en la ciudad de Los Ángeles, escribe un artículo en el que logra expresar la triple tragedia de Daphne Fernández, nos dice que: “El caso también es una tragedia porque revela nuestra incapacidad para comportarnos de manera mínimamente ética” y que, “la reacción de los muchachos responsables de la violación, sus padres y círculo de amistades fue una crueldad y cinismo inusitado“.
Una familia, un padre, una hija lastimada NO estarán nunca equivocados al llevar esto a los medios electrónicos, impresos, digitales; el equivocado es el Fiscal que no cumple su tarea. Sólo hay una forma de encausar correctamente este terrible asunto y es a través de la acción legal del fiscal, no bajo “reglas del juego” como ha llegado a expresar, sino con la ley en la mano; por supuesto con criterio social y humano, sin dejar de recordar que el centro de sus acciones es la persona, en este caso una menor de edad.
