Mucho hemos escuchado en los últimos días sobre el Bitcoin -que sólo es una marca más de este tipo de nuevas divisas- y las monedas digitales. Es un tema paradójico, con incertidumbre y pleno de más preguntas que respuestas. Lo que sí es claro, es que quienes tienen intereses en que las personas de a pie invirtamos en las monedas criptográficas están con todo generando contenido en los medios masivos para que hablemos bien o mal de ellos, pero que se hable. Que sí subieron mucho y que quienes invirtieron en desde hace dos años se han hecho millonarios, que si es un fraude, la verdad es que existe mucha incertidumbre y poca información clara confirmada. Este texto no es una forma más de promocionar este tipo de nuevas monedas, pero sí procura aclarar ciertas ideas para tener un poco más de información con certidumbre.
¿Qué diablos es el Bitcoin o las monedas digitales?
Parecería un tema muy novedoso pero no lo es. Las monedas digitales nacieron desde 2009. Justo después de las gran crisis económica de EE.UU de 2008, cuando la FED -Federal Reserve System o Reserva Federal de EE.UU- tuvo que salvar los errores cometidos por los directivos y ejecutivos bancarios en la bancarrota hipotecaria. La gente quedó muy indignada porque tuvo que pagar la negligencia de agentes privados con sus impuestos. Así las cosas, una tribu urbana que tenía mucha actividad online desde finales de los años 90’s, los cyberpunks que ya trabajaba desde entonces en actividades subversivas contra culturales digitales comenzaron a generar sistemas económicos paralelos de economía compartida para el intercambio de productos y servicios sin la necesidad de la regulación de gobiernos. Los cyberpunks eran unos genios del lenguaje criptográfico digital -lo que esta oculto en claves o códigos no superficiales para todos en internet- ,entonces, inciaron un mercado de paralelo de economía digital que ha tomado fuerza 11 años después.
¿Es un fraude más o una burbuja digital?
La realidad es que no. Es un sistema contable más. Como todas las monedas tradicionales que existen en el mundo. La diferencia aquí es que no lo avala ninguna autoridad financiera de gobierno, ni la respalda el oro o el petróleo. Aquí el respaldo es la confianza entre los que intercambian este tipo de usos del mercado. Las divisas digitales contabilizan intercambios de productos y servicios en el mercado online y tendrán más valor en la medida que nosotros mismos le demos más valor a su uso y aplicación diaria. Por ejemplo, las monedas digitales son más cómodas para el envío de dinero internacional. Los trabajadores migratorios podrán mandar más dinero, de forma más rápida a sus lugares de origen, sin necesidad de pagar tantas comisiones.
¿La moneda digital es el futuro inmediato?
Esto no está del todo comprobado. Al final, es una lucha de intereses comerciales y de negocio entre los agentes que tienen el poder económico mundial. Ganará quién sea más práctico, poderoso y genere mayor uso práctico a sus herramientas de intercambios comerciales. Por un lado están los tradicionalistas petroleros y de energías no renovables, por el otro están los grandes monstruos de energías renovables y ahora los dueños de las economías compartidas que están generando millones de transacciones todos los días ¿Quién ganará? Imposible saberlo hoy, lo que sí creo probable es que el que gane tenga un mezcla de todos los poderes en uno mismo y serán los que escriban la historia moderna actual.
Recomiendo no tener una visión minimalista de la economía digital. Ser abierto y un observador constante de lo que está pasando. Atisbar constantemente y quedarse con lo que más le convenga a todos y por el bien real de todos.