Datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE, por sus siglas en inglés) colocan a México en el primer lugar, a escala mundial, en materia de abuso sexual, violencia física y homicidio de menores de 14 años, es decir, de acuerdo con las estadísticas 4.5 millones de infantes son víctimas de estos delitos.
Entre los esfuerzos de las dependencias gubernamentales por informar y crear conciencia en la sociedad mexicana sobre la prevención del abuso sexual infantil destaca la campaña “Marcas permanentes”, lanzada recientemente por el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia de Guadalajara.
En esta campaña social la agencia Publicis México realizó para DIF Guadalajara una serie de tres carteles y un spot donde el argumento invita a reflexionar sobre el efecto permanente que sufren los menores, mientras el agresor tatúa su rostro en alguna parte del cuerpo de la víctima. El año pasado la misma agencia creó para el DIF Zapopan la campaña social “Difícil de ver”, versada en la misma temática.
El abuso sexual infantil es un delito que atañe a todos los sectores de la sociedad, estudios de la Organización Mundial de la Salud (OMS, por sus siglas en inglés) indican que a nivel mundial una de cada cinco mujeres adultas y uno de cada 13 hombres afirman haber sido de víctimas de abuso sexual en su niñez.
Por ello, organismos como el Fondo para la Infancia de las Naciones Unidas (UNICEF, por sus siglas en inglés) ha lanzado campañas sociales en cada país donde tiene representación, tal es el caso de “Abre los ojos contra el abuso sexual” en Ecuador o “Truco Dulce” en Chile.
